
Jose Antonio Canales Rivera, Laura Ponte y Olivia de Borbón amadrinaron la presentación de un espacio que durante unos días estará en el Hotel Villamagna de Madrid, a consecuencia de la unión del champán Ruinart, y el prestigioso chef Manish Mehrotra de Indian Oasis. El que fuera matador de toros, al preguntarle cómo estaba su relación con Bárbara Kimpel, cuñada de Antonio Banderas, reconoció que se habían conocido pero en ningún momento habló de noviazgo. "Ella vive en Ginebra y yo en Cádiz, y las cosas no están como para estar cogiendo todas las semanas aviones", confesó con una gran sonrisa.
"Hoy estamos en esta presentación y hay que brindar por muchas cosas que nos dan la vida, como la familia, los amigos, el amor, las fiestas, los proyectos y demás. Siempre que uno está feliz es un buen motivo por el que brindar". En el trascurso de la conversación que mantuvimos, comentó que uno de los proyectos que tenía pronto verá la luz. "En breve saco una marca de camisetas que me hace mucho ilusión, porque se llama Shalao Perdido. Con el nombre me identifico totalmente, así es como me llamaba mi abuelo, siempre decía que estaba así. Además quería hacer algo relacionado con la moda, pero que tampoco me comprometiera mucho, espero que el resultado sea bueno".

El mundo del toro no lo tiene olvidado, aunque ya no está totalmente dedicado a ello desde hace años. "Olvidado no, porque eso me hace sentirme muy bien y más fuerte que Superman. Siempre que hay festivales estoy ahí". Jose Antonio estuvo casado con Mari Carmen Fernández, y de aquella unión nacieron dos hijos. "La relación con la madre de mis hijos es cordial, los niños lo vivieron bien, porque nuestra relación, como he dicho, no ha sido mala, aunque la separación siempre es dolorosa y a ellos les afectó. Les veo siempre que quiero, es más, vivo a 200 metros de su colegio. Tienen 13 y 11 años, y sacrifico muchas cosas para estar con ellos. Al igual que su madre, yo he sido papá 24 horas cada día del año, y no puedo decir que me haya perdido nada.
Volviendo al tema de Antonio Banderas, aclaró que no le conoce. "No soy cuñado de Banderas ni muchísimo menos, es más, ni tan siquiera le conozco", declaró. De Bárbara, la hermana gemela de Nicole, novia del actor, dijo que no eran novios. "Somos amigos, y me parece absurdo mentir y engañarnos entre todos. Si yo pudiera ir todos los fines de semana a Ginebra donde ella vive, no viviría en Cádiz. No tengo cuenta ni cuento, lo que sí puedo decir es que es una mujer maravillosa, que me trata fenomenal, pero de ahí a que tengamos un noviazgo, nada de nada… El tiempo pasa para todos, no solo para mí. Estoy más tranquilo, voy madurando, es otra etapa de mi vida, en lo que hago lo que realmente me apetece. Antes tenía que hacer cosas que no me gustaban, ahora estoy muy protegido por mis amigos, hay mucha canalla suelta. Yo soy más de dar que de recibir, y al final me veo yo en todos los carteles, y no era yo el torero, era otro, como me pasaba antes.
De la relación con sus primos Francisco y Cayetano comentó que es cordial. "Ellos tienen su vida y yo también. Si no hacíamos planes cuando teníamos 15 años, no los vamos a hacer ahora con 44. Si coincidimos, lo pasamos bien, aparte de tener muchos amigos comunes. A la hija de Francisco sí la conozco, me falta el de Cayetano, reconozco que soy un poco dejado para esas cosas", comentó.

Al preguntarle por Isabel Pantoja y sus últimas intervenciones televisivas, fue muy claro en su respuesta. "No las vi, pero si lo hace sus razones tendrá, todos tenemos inquietudes y problemas. Yo nunca he tenido relación con ella, en aquella yo era carne de burro, mi madre y mi tío sí que la tuvieron. Como tampoco conozco a Kiko, aunque hemos coincidido y me parece un tío majo y divertido. Ya sé que su hermana Chabelita se lo pasa muy bien, es lo que cuentan en la televisión. Está en la edad".
A la celebración también acudieron Laura Ponte y Olivia de Borbón, que ha estado pasando unos días en el Lago de Como, en compañía de su marido, Julián Porras. "Ha sido mi primera escapada después de 2 años con Julián, creo que me lo merecía. Los niños se han quedado bien cuidados, con los abuelos y 3 cuidadoras. Por su parte Laura Ponte está feliz, y disfrutando de su nueva etapa como diseñadora de trajes de novia. "Necesitaba un empujón, porque en todos mis proyectos he tenido un socio, y mi novio Pedro me lo dio; estoy muy feliz. "No descarto casarme en un futuro, y sí es así el vestido me lo haré yo. Mis hijos están encantados, estudiando fuera de España, y a mi que sean tan independientes me gusta mucho".