Alfonso Arús y Pablo Motos, enfrentados. Tal y como publica la revista Lecturas, en la escasa semana que lleva Arusitys en La Sexta ya ha motivado el primer roce entre ambos.
Una de las secciones del programa de Arús es la Teletulia, donde los colaboradores analizan los programas emitidos el día anterior. Eso requiere que dichos espacios cedan sus imágenes al de Arús... cosa que no ha ocurrido con El Hormiguero.
La circunstancia, sin embargo, tiene aún más particularidades: tanto La Sexta como Antena 3, cadena que emite El Hormiguero, pertenecen al mismo grupo Atresmedia.
Anteriormente y durante sus emisiones en Cataluña, Arús había usado imágenes abundantes del grupo Mediaset. Ahora, con su cambio de grupo al rival directo, ya no puede hacer uso de ese material y tiene que depender de programas de su propio grupo.
Que Pablo Motos prohíba a Arús usar imágenes del programa resulta, por tanto, doblemente relevante. La productora 7 y Acción, propiedad de Motos, no ha dado permiso debido a una disputa entre ambos presentadores que viene de atrás. Durante años, Arús ha permitido a través de sus tertulianos diversas mofas y chistes a costa de El Hormiguero que, ahora, han provocado el portazo de Motos a que use sus imágenes.
La revista Lecturas explica el por qué de todo. La productora de Motos está administrada por dos socios, el propio presentador y su mano derecha, Jorge Salvador, que durante muchos años fue la persona de confianza de Arús. Ambos trabajaron juntos en Vídeos de Primera, Al Ataque y El Chou, y en la radio en Arús con leche.
Pero la relación se rompió cuando Jorge Salvador decidió trabajar en Crónicas Marcianas junto a Xavier Sardá. Arús consideró este cambio de empleo como una traición, y no dudó en atacar los proyectos donde participaba su antiguo amigo desde sus programas.
Con Salvador todavía trabajando mano a mano con Motos, éste no ha dudado en posicionarse de su lado, negándose a proporcionar imágenes a Arús pese a formar parte del mismo grupo. Arús, que habitualmente no concede entrevistas, probablemente no se deje caer por El Hormiguero a promocionar su nuevo espacio.
La revista pronostica que el roce no quedará ahí, dado que el catalán Alfonso Arús no se ha caracterizado a lo largo de su trayectoria profesional por mantener buenas relaciones con productoras y compañeros.