Arévalo va de polémica en polémica. Si no es por alguna foto o comentario en las redes sociales, es por su situación personal. La semana pasada, el programa Sálvame emitió un reportaje en el que sus vecinos aseguraban que el humorista está "dejado, decaído, buscando comida en la basura y pidiendo alimento en los mercados de Valencia". Por eso, el cómico acudió al plató de Sábado Deluxe para defenderse.
"Me han hecho mucho daño al inventarse que estoy arruinado (...) Quien no tenga un problema económico, que tire la primera piedra. Pero, ¿arruinado? Ni mucho menos. El que no trabaje uno, no quiere decir que esté mal, yo estoy bien. Yo tengo una buena mensualidad (2.000 euros) para mi jubilación", aseguró. Lo que sí reconoció es que ha puesto en venta su casa de Valencia porque es demasiado grande y vive mejor en un piso con su hija. Son muchas las mentiras que se han dicho de Arévalo, sobre todo desde que salió a la luz su pelea con Bertín Osborne.Por eso quiso desmentir que el entorno del presentador estuviera "hasta el gorro de él". "Nunca hubo en distanciamiento. Hubo un enfado entre dos amigos", confesó.
A pesar de todo, Arévalo era uno de los candidatos a entrar en la casa de Gran Hermano VIP, que abrirá sus puertas el próximo 13 de septiembre. "En septiembre yo estaba pendiente de entrar en un programa de la casa como candidato y a última hora no ha podido ser", dijo, por lo que no ha podido aceptar otras ofertas de trabajo.