Se acerca una fecha importante en la vida de Victoria Federica de Marichalar y Borbón, segunda hija de la Infanta Elena, sobrina por tanto del Rey Felipe VI. El próximo 9 de septiembre cumple su mayoría de edad, dieciocho años. Ilusionada con la fiesta que le preparan en familia, de rancia tradición, vistiendo sus primeras galas de mujer. La puesta de largo, que se decía décadas atrás. Familias de alto rango han solido siempre hacerlo, aunque los cambios sociales determinaran en los últimos tiempos su declive. Esas muchachas que han lucido modelos de firma, casi de novias, en algún palacete o en hoteles de raigambre. Acompañadas cada una de un joven caballero, también de la nobleza o de clases elevadas, naturalmente de etiqueta, léase con esmoquin o frac. Culminado el desfile con un baile, el de las debutantes. En ese ambiente se espera que Victoria Federica, acompañada seguramente de otras damas, luzca su encanto de quien deja la adolescencia y entra en el periodo juvenil.
Lo que ignoramos al redactar estas notas es el lugar donde tendrá lugar el evento. Se especula con el palacete que los Marichalar, su familia paterna, posee en tierras sorianas. Y si es en Madrid ya es una incógnita. ¿En el Casino de la calle de Alcalá, tal vez? Lo importante, claro está, con ser de relieve el lugar, es que Victoria Federica ya puede, si lo desea, vivir su independencia, a pesar de que, por lo sabido, nunca ha dado serios problemas a sus progenitores quienes, dicho sea de paso, tendrán que verse las caras en ese evento, cuando hace tiempo que, desde su divorcio, no suelen coincidir a menudo, aunque tengan contactos siempre relacionados con la educación de sus dos hijos, en particular con el primogénito, Froilán, que es el que más quebraderos de cabeza les ha ocasionado por su carácter algo indómito, últimamente más serenado.
También nos preguntamos si a la puesta de largo, además de la Infanta Elena por supuesto, la madre, asistirán los Reyes eméritos. Pensamos que doña Sofía sí estará presente, siempre tan pendiente de sus hijas y nietos. A don Juan Carlos esos saraos le divierten poco, y menos en estos tiempos que corren. Ya no es tan campechano cuando algún reportero se atreve a preguntarle algo sobre su vida, evitando manifestarse sobre su intimidad. Lo de que acudan los Reyes, don Felipe y doña Letizia ya es improbable. En el palacio de la Zarzuela sus asesores miden bien su agenda. ¿Y la Infanta Cristina, hará su aparición? Tampoco parece que vaya porque estando su marido en la cárcel no está para jolgorios.
En el pasado mes de agosto Victoria Federica ha disfrutado de un veraneo por distintos lugares de España. En la feria de Málaga acudió a la plaza de toros, La Malagueta, donde Roca Rey le brindó un toro dirigiéndole unas cariñosas palabras que alguien publicó, al parecer, distorsionando su contenido, en la creencia de que era poco menos que una declaración amorosa. Lo cierto es que pocos días después, exactamente el jueves 23, Victoria Federica estuvo también en la feria taurina de Almería. Estuve en ese festejo y alcancé a divisar a su padre, Jaime de Marichalar, ocupando un lugar preferente en el callejón. Victoria Federica se sentó en una barrera. ¿Le proporcionó la entrada uno de los toreros de esa tarde? Es lo que nos pareció probable. Su nombre: de nuevo Roca Rey. Esta vez, el brindis del diestro peruano no fue para ella… sino para Jaime de Marichalar. Los comentarios se han disparado acerca de la pareja. ¿Son novios? Prematuro es asegurarlo, mas de ese seguimiento de la hija de la Infanta, dos veces seguidas en poco tiempo, para aplaudir al torero limeño, puede extraerse que, al menos son dos muy buenos amigos.
La afición taurina de Victoria Federica es heredada de sus padres. Su hermano Froilán se hizo amigo hace un par de años del torero madrileño Gonzalo Caballero. Iban en una pandilla. Victoria Federica apoyó con su presencia la carrera de este joven matador de toros, lo que supuso que en algunos medios se la relacionara sentimentalmente con él. Luego parece que únicamente mantienen una amistad sin compromiso. Y ella está más interesada en la actualidad por Roca Rey.
Y ¿quién es este nuevo fenómeno de la fiesta brava? Hoy en día encabeza el escalafón en número de trofeos y festejos lidiados. Viene a ser otro revolucionario de la fiesta, como antes lo ha sido José Tomás, que ahora apenas torea. Andrés Roca Rey cumplirá veintidós años el próximo 21 de octubre. Nació en Lima en el otoño de 1996 en el seno de una acomodada familia de amplia tradición taurina. Su padre es ganadero de reses bravas: el primero que apoyó el deseo de su hijo en ser torero. Andrés ya tiene un hermano, Fernando, diez años mayor que él, también matador de toros. Un diestro sevillano, ya retirado, José Antonio Campuzano, lo trajo a España llevándolo a su finca de Gerena a entrenar, y a muchos tentaderos. Hoy es su feliz apoderado. Andrés recuerda años atrás cuando para ganar algún dinero y no depender de su familia, se ganaba unos euros repartiendo propaganda a las puertas de la Maestranza sevillana. Hoy es millonario, dinero ganado en apenas tres años, desde que tomara la alternativa en Nimes en 2015.
¿Será Roca Rey el gran amor de Victoria Federica? Pronto es para saberlo. Parejas de toreros y aristócratas y nobles hubo en el pasado, ya desde los tiempos de la duquesa Cayetana que pintara Goya. En tiempos más recientes conocemos los casos de Domingo Ortega y el albacetense Manolo Amador, casados con marquesas.