Tras su fulgurante, pero no por estelar, paso por el Ministerio de Cultura y Deporte, Màxim Huerta procedió a tomarse unas largas vacaciones de las que ha ido dando buena cuenta a través de Instagram.
Pero quedaba por ver su reaparición televisiva, sobre todo debido al pasado periodístico del presentador valenciano. Su episódico regreso tuvo lugar en Socialité, el programa del corazón conducido por María Patiño en la misma cadena donde Huerta copresentó El Programa de Ana Rosa.
Allí Huerta explicó su largo viaje por Almería, Altea, Francia, Italia y Reino Unido... y un largo etcétera que justificó como una larga documentación para su futuro libro: "Mis viajes forman parte de la construcción de una futura novela. Ese es mi trabajo".
Así pues, tal y como dijo durante sus seis días en el puesto polémico exministro de Cultura, "estoy escribiendo". Una de sus últimas imágenes le muestra desafiando tópicos de países comprando una pizza en Puglia, Italia. Y un hashtag utilizado en otra imagen, "procrastinaciónNivelFirmamento".
Atrás quedan los 218.322 euros defraudados a Hacienda entre 2006 y 2008 que forzaron a Huerta a dimitir de su puesto menos de una semana después de haber sido nombrado, en el primer gran escándalo del mandato de Pedro Sánchez.