Sara Carbonero hizo una visita relámpago a Madrid en su gira como imagen de la nueva campaña de verano de la firma de baño Calzedonia. "Me cuesta mucho posar en bañador, tengo mucho pudor, sé que puede sonar a absurdo. Espero que esto desaparezca después de haber hecho esta campaña, porque no hay nada mas natural que un cuerpo", explicó.
Durante su encuentro con los medios, Sara habló del futuro profesional de su pareja, Iker Casillas, y comentó que no tiene predilección alguna sobre el próximo destino. Lo que sí aclaró que a China es imposible porque no ficha a porteros extranjeros. "Todavía es pronto para decir nada. A mí me da igual dónde vayamos, lo importante es que Iker sea feliz, juegue donde juegue. Estaría bien quedarnos en Oporto porque en esa ciudad nos sentimos como en casa. Nuestros hijos están adaptados, tenemos buenos amigos, sería maravilloso que nos quedáramos", declaró.
Con la situación en la que se encuentra, Sara prefiere no hacer planes profesionales. "Hasta que no sepa cuál será nuestro próximo destino, no quiero hacer planes. Tengo ofertas profesionales relacionadas con la escritura, que son muy apetecibles, pero ya veremos. Si algún día publico un libro, quiero que sea digno de leer, que no sea cualquier cosa. Ya estoy fraguando algo".
Además, la pareja no descarta aumentar la familia. "Con el tiempo tendremos un tercer hijo, pero no nos ponemos plazo. Mis hijos tienen 4 y 2 años y como todos los críos, hay veces que se pelean por el mismo juguete. El pequeño es más revoltoso, es muy agotador estar con dos tan pequeños, te absorben mucho". En verano viajarán a Rusia al Mundial de fútbol para después descansar en la playa.