En la revista ¡QMD! abundan en la noche de pasión de Kiko Hernández y Nuria Bermúdez, desvelada la semana pasada. El paparazzi Gustavo González, enredado ahora mismo con su particular triángulo amoroso con María Lapiedra, desveló que el colaborador de Sálvame tuvo lo suyo con Bermúdez en la época en la que trabajaban en Crónicas Marcianas. A Kiko le ofrecieron entonces hacer un montaje con Nuria, a lo que éste se negó radicalmente. Y precisamente a colación de esto, y para evitar rumores sobre su vida privada, desveló que "en 2002, cuando salgo de Gran Hermano, me enrollo una noche con Nuria Bermúez. Una noche, no más. La pareja coincidió en una noche de copas y acabó en la casa que entonces tenía Nuria en la calle Ibiza, en Madrid. La pasión les pilló en plena cocina, con la Bermúdez abalanzándose sobre Kiko y rodando por el suelo. Y hasta ahí llegó la cosa, porque no hubo más.
En la revista Pronto, Letizia. O mejor dicho, su exmarido Alonso Guerrero y su novela en la que ficciona su relación con la actual Reina, que ha titulado El amor de Penny Robinson. Cómo Letizia descubrió su pasión por la literatura gracias a él, profesor de esa disciplina, y cómo vivieron una relación tranquila hasta que ella se vio inmersa en lo que todos conocemos. Además, el marido de Arantxa retira su demanda de divorcio y Jesús Calleja resume los mejores momentos de la nueva temporada de su programa.
Llegamos a Corazón TVE, que recopila la gran farsa de Arantxa y Santacana, sus demandas y mentiras cruzadas para evitar la cárcel. Si, como decimos, el marido ha retirado la demanda de divorcio (para evitar presentar documentación comprometida sobre sus propiedades y activos), ahora es la propia Arantxa quien da el paso a través de sus abogados: su objetivo sería conocer de una vez dónde está la fortuna que Santacana manejaba. Según los abogados de ella, un hombre, Jorge Guirian, sería la clave: un testaferro vinculado directamente con Santacana que tendría información útil para despejar semejante incógnita. El paraíso fiscal donde habrían depositado el dinero sería Uruguay, donde una sociedad se encargó de vender parte de los inmuebles que en su día pertenecieron a Arantxa.