Un teléfono abierto pone en apuros a Carmen Gahona

El combo Sálvame-Carmen Gahona nunca pasa desapercibido. La mujer de Chiquetete atendió una llamada del programa y charló con una de sus reporteras sobre la situación familiar tras la reciente pérdida de su suegra Manuela Pantoja la Chumina. Nada más terminar, a Carmen se le olvidó colgar el teléfono, pero a Sálvame no, y sus incendiarias palabras han puesto patas arriba al clan Pantoja. La indiscreta grabación se reprodujo en directo en el programa y en ella se oye a Gahona hablando muy mal de Anabel Pantoja y su padre Bernardo.

"Vas a recordar lo que ha dicho Anabel Pantoja, que la dejaban sola en un cuarto cagá y meá y os ibais por ahí, no entrabais en la cocina porque os daba asco y que le habéis robado todo el dinero". "Qué mala es Anabel. Pantoja, claro", le soltó a su marido Chiquetete. "Llama mañana a tu tío Bernardo. A esta "coja" a ver si le cortan la otra pierna y tiene que arrastrarse por el suelo". Durante la conversación, tiene también para Antonio, el hijo de Chiquetete: "Éste es tuyo y mío, y aquello es tuyo y mío. (...) Vamos a vender el piso bien vendido, vamos a buscar un apartamento chiquitito para vivir en Sevilla, para tener nuestra casita en Sevilla. Pero vamos a tener problemas con el otro, te lo digo yo. Sí, con el Antoñito (hijo de Chiquetete), que quiere el piso por cojones, el Antoñito ha ido al registro".

Ante semejante desliz, el programa le devolvió la llamada y la reacción de Gahona fue de nerviosismo total. Ella conoce muy bien la televisión, incluso se ha planteado el hecho de que su conversación no sea ningún descuido, ya que busca que hablen de ella lo máximo posible: "Vamos a dejar que hablen. Cuanto más hablen, mejor cotizados estamos. A mí me conviene que hablen, pero que lleven pruebas. Eso se llaman cebos. Antonio, la televisión funciona así. Tú hablas un poco y ahora los demás hablan. Cuanto más hablen de ti, más te pagan". Ella misma lo confirmó en directo por teléfono: "De todo el dinero que he ganado en televisión, ya no me queda nada. Me lo he gastado todo en pagar las deudas de mi marido y de Manuela".