Agatha Ruiz de la Prada organizó hace unos días, en su tienda de Madrid, una presentación de trajes de flamenca diseñados por Lourdes Montes, la mujer de Francisco Rivera. "Somos muy amigos desde hace muchos años. Nos han dado premios, por lo menos 10 y nos llevamos muy bien, le he conocido varias novias y Lourdes es ideal, tenemos una amistad estupenda. Yo hace tiempo diseñe cosas flamencas y ahora voy a volver a hacerlo. Antes no era muy del sur, pero reconozco que ahora sí. Me encantan las sevillanas, empecé a ir a clase, pero me rompí el brazo y tuve que dejarlo. Ahora voy a retomarlo", declaró.
La diseñadora, según dijo, está imparable y no para de hacer cosas con una energía que muchos la quisieran: "Es la gran semana de Madrid, me han invitado a 12 cenas en Arco, y solo podré ir a 4, las otras que vaya mi hija Cósima. Estoy llena de proyectos. No sabía que el divorcio daba para tanto, como dice Federico: "Qué divorcio me están dando", comentó con sentido del humor. "No sé si será una liberación, lo que si te puedo decir es que todo el mundo se ha volcado conmigo. No paran de llamarme, de invitarme a cenas. Todo el mundo se solidariza, solo dos pizquillas de gente se han portado mal y no me importa nada. Estoy más divertida que nunca y con más trabajo. Tengo una sensación de libertad plena y eso que siempre he sido muy libre", explicó.
No se cierra al amor en absoluto y como dijo, está haciendo castings." No sé lo que ocurrirá, todo es posible, desde el momento en que te divorcias, te enamoras y desenamoras con facilidad, pero no son cosas `para publicitar. Tengo pretendientes pero me gustaría tener más".
La relación que mantiene con sus hijos es inmejorable. "No paran de viajar. No me quitan mucho trabajo, pero no me quejo. Ahora tengo que hacer unos viajes por diferentes ciudades españolas y después tengo que ir varias en Méjico, también a Costa Rica y Uruguay. Así es mi vida".
