Hace unas semanas descubrimos que María Lapiedra y Gustavo González han mantenido una relación paralela a sus respectivos matrimonios durante más de ocho años. Sin embargo, la actitud de Mark Hamilton, marido de la actriz, y la de la propia María despiertan ciertas dudas.
María Patiño desveló este miércoles que el matrimonio se vio en una pastelería y, según contaron algunos testigos, estaban "muertos de la risa" y derrochando "complicidad".Sin embargo, Mark visitó Sálvame para negar el doble juego y aseguró que estaban juntos por el bien de sus hijas.
Mark Hamilton intentó defender en el programa de Telecinco el honor de María Lapiedra como madre de sus hijas, aunque no como pareja, ya que asegura sentirse engañado por la relación de su mujer con el paparazzi. El marido de María desmintió que su esposa tenga un trabajo oculto y criticó a Gustavo González por no defenderla sin titubeos: "Hacer stripteases y webcams no tiene nada que ver con lo que se está diciendo, no hay derecho ¡Y el otro dudando!".
Sin embargo, la actitud de Mark y María sigue despertando los recelos de los colaboradores. María Patiño lanzó una pregunta a Mark: "¿Os visteis durante la tarde de ayer?" El aludido lo negó inicialmente pero, cuando le hablaron de una pastelería, su gesto cambió de inmediato y terminó reconociéndolo: "Fue por un tema de pediatra, no quedé con María para hablar de nada".
Patiño hizo esta afirmación en base a una información de Laura Fa: "Estaban muertos de la risa y con mucha complicidad", dijo, añadiendo: "Hablaron de todo lo que está ocurriendo. En privado lo viven de una forma muy diferente". Sin embargo, Mark volvió a justificarse: "Si están las niñas delante, actuamos así".
Y no es la única información sobre la relación que mantienen Lapiedra y Hamilton. Rafa Mora aseguró tener capturas de móvil y audios en los que el matrimonio hablaría de "cifras", "números" y quedaría claro que su relación es "de conveniencia", algo que Mark volvió a negar.
Para rematar la situación, continúan conociéndose testimonios que hablan del trabajo oculto de María Lapiedra. Este miércoles, un joven de 19 años aseguró que contrató a la exactriz porno para trabajar en su cumpleaños: "Yo quería dos cosas, un striptease y pasar una noche con ella". "Primero fue el striptease, fueron 500 euros", aseguró, confirmando que volvió a verla al día siguiente. "Estuvimos hablando con ella y nos dijo cuánto quería. Al final vino a mi casa, estuvimos hablando una media hora, le caí bien y ella me cayó bien".