Tras su fallecimiento el pasado 11 de diciembre a los 94 años, los familiares y amigos más cercanos de la condesa de Romanones se dieron cita en la Iglesia de San Fermín de los Navarros para la misa funeral en su nombre.
Al igual que sucedió en su entierro, el duque de Alba fue uno de los rostros conocidos que no quiso faltar a la cita, y es que el hijo de la duquesa de Alba mantiene una muy buena relación con la familia. Sus hijos, Carlos y Fernando, también acudieron a la misa funeral.
Haciendo gala de la buena relación que mantiene con el que fuera el marido de su madre, el duque de Alba saludó de de forma cercano y cariñosa con Alfonso Díez, otro de los que acudieron a la misa.
A la salida, Alfonso se mantuvo de lo más correcto cuando le preguntaron por los continuos enfrentamientos de Cayetano Martínez de Irujo con la prensa y se limitó a decir: "Tiene genio, es lo que hay". Mucho más esquivo con las preguntas sobre su familia estuvo el duque de Aliaga, que también acudió al funeral y a la salida dejó claro ante la prensa que hace muchos años que él no contesta a ninguna pregunta referente a su vida personal.
Como no podía ser de otra forma, los nietos de Aline Griffith también acudieron a la misa funeral. Ese fue el caso de Lulú Figuera que salió de la Iglesia a toda prisa y con el gesto serio.
Entre los otros asistentes que se dejaron ver a la entrada y a la salida de la Iglesia estuvo Naty Abascal junto a Tomás Terry, la duquesa de Fernandina, Jaime de Marichalar y Paloma Segrelles entre otros.