La crónica rosa de Es la mañana de Federico contó con Paloma Barrientos y Carlos Pérez Gimeno para tratar todos los temas de la actualidad social. Centrados, esta vez, en el desfile de la Fiesta Nacional y la recepción de los Reyes en el Palacio Real.
La periodista Paloma Barrientos estuvo presente en el citado besamanos, y pudo presenciar de primera mano lo que ocurrió en la recepción, en la que hubo cóctel preparado por la firma Mallorca y se brindó con cava.
También pudo hablar con Letizia sobre, por ejemplo, la razón por la que la infanta Sofía llevase en el desfile un brazo escayolado por un problema en la muñeca, al que la propia Reina quitó importancia. "Se dobló dos dedos con el balón" y, al tener que realizar tantos saludos de cara al 12 de octubre, los médicos creyeron mejor escayolar el brazo.
Pero no solo la pequeña Sofía sufrió un percance de este tipo: también la propia Letizia Ortiz sufrió durante el besamanos porque, tal y como explicó Barrientos en esRadio, "la Reina tenía un tobillo mal". "Aguantó estoica las dos horas de la recepción con sus tacones, pero al acabar los saludos se retiró al fondo de la sala y permaneció sentada por culpa del tobillo".
No obstante, nada impidió que la Reina estuviera "encantadora", y que el tono general del acto fuera especialmente satisfactorio. "Lo que gustó y llamó la atención es que, por fin, fue la recepción del Jefe del Estado. Han tenido que pasar años para que sea así". Para Barrientos, "de las muchas recepciones la de ayer no era ni la de los reyes eméritos, la de Sofia o el caso Noos. Era la del Rey, que era el anfitrión y recibía. Fue la fiesta de la unidad de España".