Isabel Pantoja se ha encontrado ahora con un nuevo quebradero de cabeza económico que no esperaba. Y es que tras la muerte de su gran amigo, el cantante Juan Gabriel, la tonadillera ha heredado un inmueble situado en el madrileño barrio de Chueca. Un pisazo en el centro de la capital, frente al conocido Mercado de San Antón.
El impresionante inmueble consta de 9 habitaciones, distribuidas en 231 metros cuadrados y valorado en más de un millón de euros. Sin embargo, según publica Vanitatis, se trataría de un regalo "envenenado", ya que el piso tiene una hipoteca abierta y le supondrá unos gastos por un valor de 240.000 euros, aunque, transcurridos los años, deberían de haberse liquidado unas tres cuartas partes. El problema estaría en que el impuesto de sucesiones en un inmueble como este, rondarían los 350.000 euros, lo que supondría un 34% sobre la tasación oficial del mismo. Aún así, hay más letra pequeña en la herencia, ya que el piso tiene asociada una buhardilla, con una superficie de 27 metros cuadrados útiles, que según la publicación "si Pantoja, previo pago, consigue para el mismo la cédula de habitabilidad y lo escritura, puede venderla y a precio de mercado y sacar una cantidad que ronde los 150.000 euros, sacudiéndose así parte de los gastos de esta herencia".
Se trata de la única propiedad en España del cantante mexicano, cuyo nombre real es Alberto Aguilera Valadez, y que fue adquirida en el año 2003. Aunque entre México y EEUU acumula más de un centenar de inmuebles en doce localidades distintas, además de locales, estudios de grabación e, incluso, un hogar de menores.