A Cameron Douglas, hijo del actor Michael Douglas, los casi siete años que ha pasado la cárcel le han transformado incluso físicamente. En el 2010 entró en prisión por posesión reiterada de drogas y tráfico de metanfetaminas y tener heroína mientras estaba de arresto domiciliario.
Nada más salir hace escasos días creó una cuenta de Instagram para reflejar cómo es su nueva vida y su cambio físico tan significativo. Su primer mensaje fue “Sé la energía que quieras atraer”, comentario que refleja bien en que situación se encuentra actualmente.
Cameron ahora tiene el cuerpo completamente tatuado, está muy musculado y se ha cortado el pelo. Antes de entrar en prisión, el hijo de Michael tenía un aspecto más demacrado, su cuerpo no estaba tonificado y tenía el pelo largo. El reflejo de un estilo de vida sin duda más acomodado, pero también deteriorado por la tensión y las drogas.
Ahora, sin embargo, utiliza la red social para anunciar de futuros proyectos, para mostrar su amor por su novia, dar mensajes motivadores y enseñar a sus seguidores que nunca es tarde para cambiar, como “estoy soñando en grande”, “Yo respiro el oxígeno que me mantiene vivo. Yo digiero el dolor mientras me permita prosperar”.
Además, se rumorea que va a lanzar un libro contando cómo fueron sus casi siete años en prisión. “Cameron hablará de su lucha por ser hijo y nieto de íconos de Hollywood y de sus malas decisiones que lo llevaron a la cárcel. Él cree en un nuevo comienzo y en la oportunidad de una nueva vida”, desveló una fuente al New York Post. Tiene pensado continuar con su carrera como actor y ha fundado una organización benéfica para ayudar a otros drogadictos que lo necesiten.