La vida de Dulce Delapiedra empieza a complicarse. Nada más salir de Supervivientes, concedió una entrevista en Lecturas en la que aseguraba que "había sufrido acoso sexual en Cantora" por parte de Julián Muñoz. Una semana después de sus sorprendentes declaraciones, la niñera habló en el plató de Telecinco para desmentir lo que se había publicado y aclarar que en ningún momento había nombrado al exalcalde ni había nombrado acoso sexual, dando a entender que la revista había tergiversado sus palabras.
A partir de ahí, la gente implicada en este asunto, como el periodista de la entrevista o la propia Isabel Pantoja, se plantean denunciar a Dulce por mentir, por lo que, de la noche a la mañana, le llovieron los problemas. Ahora, tal y como explicó Alaska en la Crónica Rosa de Es la Mañana de Federico, junto con Carmen Jara y Carmen Duerto, "Dulce está muy agobiada por las posibles demandas que puede tener".
Además, la tertuliana comentó que la impresión con la que se queda después del discurso de la niñera es que ésta busca un acercamiento con la tonadillera y que la letra pequeña de todo lo que dice es: "Pobre Isabel que no sabía nada, pobre Isabel que le engañan siempre, pobre Isabel lo mucho que ha sufrido".