María José Campanario se convirtió sin querer en la protagonista de un curso organizado por el Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de Cataluña. La mujer de Jesulín de Ubrique ha terminado sus estudios de Odontología y, como cualquier estudiante, sigue formándose para poder ejercer cuanto antes. En el curso de Barcelona, al que acudieron algunos de los médicos más importantes del sector, Campanario pretendía conocer algunos de los avances más punteros en la materia, pero su curiosidad se vio eclipsada por los comentarios de los allí presentes.
Tal y como cuenta Vanitatis, algunos de sus compañeros de profesión criticaron que María José se sentara en primera fila junto a Toni Gómez, presidente del Colegio de Odontólogos, y del doctor Fernando Autrán, uno de los profesionales más prestigiosos. Muchos no entendían por qué una recién graduada se sentó en un lugar tan privilegiado y denunciaron trato de favor por ser quien es.
Ella misma quiso aclarar la situación ofreciendo unas declaraciones al citado medio. "Quienes organizan el curso son amigos míos. Me sentaron en esa posición porque conocen de mis problemas cervicales y entendieron que estaría más cómoda", aseguró. Campanario, recién operada de cervicales quiso dejar claro que acudió como una odontóloga más: "Le pese a quien le pese, soy médico, esto es así".