La Abogacía del Estado, que representa a Hacienda, pide tres años de cárcel para Borja Thyssen por defraudar unos 630.000 euros en los impuestos de la renta y patrimonio de 2007, según informa El Confidencial.
La ONIF (Oficina Nacional de Investigación del Fraude de la Agencia Tributaria) investiga al aristócrata desde hace años. Según recuerda LOC, la instrucción, que comenzó en 2013, se ha llevado a cabo en un juzgado de Pozuelo. Por él han pasado desde los guardaespaldas del matrimonio formado por Borja Thyssen y Blanca Cuesta, como su propia madre, la baronesa. El objetivo: determinar la auténtica residencia fiscal de Borja o, lo que es lo mismo, si el primogénito de Tita Cervera estaba obligado a tributar en España en el año investigado.
Hacienda acusa a Thyssen de no tributar en España por sus ingresos de ese año, que incluyen los 300.000 dólares de adelanto del pacto de Basilea –el acuerdo que establecía el reparto de la herencia del barón Thyssen. Según declara a El Confidencial el abogado de Thyssen, Pedro Mejías, su cliente "no ostentaba la cualidad de residente fiscal en España" ese año.
Por otro lado, en el juzgado de instrucción 4, Borja Thyssen tiene otro procedimiento penal abierto por el impuesto sobre la renta de 2010. La base de la declaración son los cinco millones del pacto de Basilea, la liquidación de la herencia del barón.