Gonzalo Vargas Llosa ha hablado con Martín Bianchi, periodista de ABC, sobre la relación que mantienen su padre e Isabel Preysler. Todo a colación de la exclusiva que concedió la pareja en ¡Hola!, donde el Premio Nobel aseguraba haber vivido el año más feliz de su vida... asegurando que para ellos ha sido "el más infeliz".
Una exclusiva que no ha sentado nada bien a la familia de Mario Vargas Llosa. "Una cosa es que a lo mejor lo piense, pero que lo diga en público delata una falta de sensibilidad, tacto y elegancia alarmante.
Porque, claro, este es el mismo año que se separó de su compañera durante más de 50 años y en el que prácticamente no ha tenido comunicación con dos de sus tres hijos y cuatro de sus seis nietos... Es decir, con tres cuartas partes de la familia Vargas Llosa. Para varios de nosotros, este ha sido el año más infeliz de nuestras vidas", explica Gonzalo Vargas Llosa.
Respecto a cómo se encuentra su madre, el hijo del escritor explica: "Está en Lima, rodeada de amigos y de su familia, incluida mi hermana Morgana, que es un extraordinario apoyo para ella".
Asegura que no sabe si algún día podrá tener una relación cordial con Isabel Preysler: "Si ella hubiese actuado de una manera distinta, con cierta discreción y con más sensibilidad hacia mi madre y nuestra familia, yo creo que, después de un tiempo razonable, habríamos podido tener por lo menos una relación cordial", ha dicho sobre la reina de corazones.
En cuanto al comienzo oficial de la relación entre su padre y la madre de Enrique Iglesias asegura: "Es positivo que en la entrevista se haya confirmado la versión según la cual su relación con Isabel comenzó inmediatamente antes o después de que ella le fuera a ver al Teatro Español el 22 de febrero, es decir, por lo menos tres meses antes de que mis padres se separaran.
Gonzalo también critica el hecho de que Vargas Llosa participe ahora en las revistas del corazón, concediendo exclusivas como la de la revista ¡Hola! "Estoy seguro de que la explicación es más bien que quiere complacer a su pareja. Pero, aun así, su creciente involucramiento con el cuché puede tener consecuencias muy negativas".