Mireia Lalaguna, una Miss Mundo con el corazón roto

Mireia Lalaguna prefiere no hablar del tema porque las lágrimas se lo impiden. "He recibido muchas felicitaciones de muchísima gente y de algún ex mío también, pero de quien yo quería no, lo digo por si lo lee o me escucha. Me da rabia". Así fueron sus palabras, refiriéndose a alguien que le ha robado el corazón, aunque prefirió no dar el nombre.

La catalana es la nueva Miss Mundo desde el pasado 19 de diciembre, fecha en la que se alzó con la corona, en la ciudad china de Sanya, y ha sido la primera española que ha conseguido tal galardón.

Tan solo le queda un curso para licenciarse en Farmacia, pero ha tenido que viajar a Dinamarca, lugar donde estudiaba, para cancelar la matrícula de este año. "No voy a tener tiempo, por el momento es imposible compaginar las dos cosas, el año próximo ya veré lo que hago. Lo que sí tengo claro es que la carrera la terminaré por encima de todo. Me trasladé a Dinamarca primero por hacer un Erasmus, me quedé allí y conseguí un trabajo en unos laboratorios. Me apetecía estudiar fuera de España y perfeccionar mi inglés, y en ese país podía hacerlo todo", comentó.

Mireia tenía en mente presentarse a este certamen por sus características de ayudas sociales a países desfavorecidos, entre otras cosas, y reconoció a lo largo de la entrevista que la corona pesa mucho, por la responsabilidad que conlleva el haberlo conseguido. "Tengo que prepararme para todas las cosas que tengo que hacer. Quiero ir a Filipinas y a África, porque de Asia ya lo conozco casi todo. Creo que hay mucho que hacer en esos países", explicaba la flamante Miss Mundo.

"No me asusta lo que me espera y no siento que este título tenga una historia triste por el recuerdo de Amparo Muñoz. Ella fue Miss Universo, yo llevo mi ritmo de vida fijo, intentaré hacerlo lo mejor posible y espero vivir de ello", declaró.

La nueva Miss pertenece a una familia tradicional que al principio no le apoyó mucho cuando decidió presentarse. Pero todo eso ya es historia. "Ahora están encantados. Saben que terminaré la carrera y han estado conmigo en China, y han visto lo sano que es el concurso y la organización. Pero quien está como loco es mi hermano, tiene 18 años, y no para de alardear de hermana", comentó entre risas.