Kiko Matamoros tiene ahora varios frentes abiertos en Gran Hermano VIP, con su hija Laura y su hijastro Javier encerrados en la casa de Guadalix. Pero ello no le ha impedido pasar por la clínica para hacerse unos nuevos retoques estéticos, esta vez consistentes en un gran microinjerto de 500 pelos en cada ceja.
¿Y de dónde han cogido los responsables de la intervención los pelos necesarios? Del propio cuerpo de Matamoros y, en concreto, de su nuca. El colaborador estaba alarmado porque también se estaba quedando sin pelo en las cejas, lo que mermaba su expresividad y "personalidad".
Tal y como se reveló en el propio programa emitido por Telecinco, todo esto, junto a otros retoques estéticos, son el motivo de que Kiko Matamoros llevara una "X" detrás de la cabeza en los últimos días. Unas operaciones realizadas esta misma semana y que requerirá de varios días de descanso. No obstante, hasta dentro de un año no podremos ver los resultados: "Los efectos definitivos son a largo plazo", explicó él mismo.
Por la mañana a las 7:30 horas, y tras cuatro horas de operación, le fueron implantados 500 pelos en cada ceja. Kiko salió de la clínica acompañado de Makoke y un tanto mareado, pero dispuesto a hablar con el reportero apostado a la salida de la clínica. Ni que decir tiene que el asunto fue la comidilla del resto de colaboradores del programa.
¿Qué será lo próximo? Tal y como Kiko ha confesado, todavía tiene "dos operaciones pendientes, que ya os iré contando, para escándalo general".