Poco ha tardado Laura Matamoros en protagonizar los primeros conflictos en Gran Hermano. La joven no tiene ningún problema en hablar de la mala relación que mantiene con Makoke, la actual mujer de su padre, y de "lo infeliz" que es éste. El problema es en que convive en la casa de Guadalix con el hijo de la modelo, lo que hace que la tensión sea cada vez mayor y que la joven ya haya advertido que "algún día explotará y lo contará todo".
Laura es hija de Kiko Matamoros y de Marián Flores, hermana de Mar Flores y la primera mujer del colaborador de Sálvame, recuerda Semana. La mujer, de 58 años, estuvo casada con Matamoros desde 1984 a 1996 y tuvieron cuatro hijos: Diego, Laura, Lucía e Irene. Era secretaria en TVE hasta que hizo el casting para ser azafata del Un, dos, tres… puesto que consiguió. Según desvela la revista, su sueño era convertirse en una reconocida actriz pero, lejos de conseguirlo, fue su hermana Mar Flores la que alcanzó la fama.
Los primeros ocho años de matrimonio, la pareja vivió en Sevilla, donde él trabajaba como responsable de doblaje en Canal Sur. Ya en 1992 la familia se mudó a la capital y éste montó una agencia de representación artística, en la cual llevaba a famosos como Mar Flores, su entonces cuñada, Carmina Ordóñez o Makoke, su actual mujer.
La pareja decidió poner fin a su matrimonio en 1996, una separación que fue muy dura y le produjo muchos problemas económicos y personales, tal y como ella misma desveló en el 2014 en Sálvame Deluxe. Confesó que pasó por bastantes necesidades y que tuvo que alquilar la casa en la que vivía para poder pagar la hipoteca. Ahora, alejada de los medios, vive en Sevilla y vuelve a ser el centro de atención por todos los conflictos de sus hijos con su exmarido.