Cristiano Ronaldo pasó un feliz domingo de chapuzones con su hijo y uno de sus grandes amigos, Ricardo Regufe. Y lo hizo en el Pantano de San Juan, uno de los principales destinos para quienes, en la Comunidad de Madrid, buscan una zona de baño natural similar a una playa.
Ausente en el amistoso jugado en Oslo este fin de semana, el delantero blanco descansó para así recuperarse de la leve lumbalgia que le impidió asistir a la Audi Cup en Múnich.
El propio Cristiano difundió en su cuenta oficial de Instagram la imagen en la que luce su musculoso y bronceado torso, que le ha convertido en uno de los ganchos comerciales para muchas firmas de moda, a punto de darse un baño en esta zona tan popular, lejos de los exclusivos clubes que le podríamos presuponer a un jugador de su categoría.
Y un vídeo en el que inmortalizó su día de diversión con su hijo a bordo de un barco, todo ello bajo el sol madrileño.