La felicidad de Tita Cervera, tras el bautizo de su nueva nieta Kala, le ha durado muy poco, ya que este lunes se enteró de que el juzgado número 40 de Madrid había admitido a trámite la querella que interpuso el que hace años fue su jefe de seguridad en la que le acusaba, a ella y a su abogado, de tráfico de influencias, según desvela Beatriz Cortázar en Gentestilo.
El auto de resolución, que se firmó el pasado 12 de junio, se admitió a trámite porque "pudiendo ser los hechos denunciados constitutivos de delito de tráfico de influencias se procede a la incoación de diligencias previas", explica el documento. Esta querella se añade a la que uno de sus escoltas presentó hace nueve años por "mobbing" y despido improcedente, ya que, según él, la baronesa lo despidió durante su baja por paternidad. Asegura que en una de sus reuniones le ofreció trabajar en el Museo Thyssen en el departamento de Seguridad para "un puesto creado para él y al que se debería acceder por concurso público", explica el diario.
Después de estas conversaciones decidió poner esta querella. La defensa de la baronesa no le da ninguna credibilidad ya que "no tiene mucho recorrido y solo busca un titular en los medios". También aprovechan para recordar que en su día se presentó en el juzgado de Alcobendas y no fue admitida. No obstante, el abogado del escolta matiza que "no se admitió el delito de tráfico de influencias porque se señaló que eso era competencia de los juzgados de Madrid".
"No hay tráfico de influencias porque la seguridad del museo, al igual que la de la baronesa, depende de Casesa y ellos pueden mover a sus empleados sin necesidad de concurso público ni que el Patronato lo apruebe en Junta. Ya se hizo con otro empleado anterior y se comunicó al Patronato por mera cuestión de cortesía", explican los abogados de Carmen Cervera. Aunque sería más fácil llegar a un acuerdo que el pasar por esta situación, "la cantidad que está reclamando es desorbitada, ya que se acerca a los 250.000 euros, y crearían un precedente que no se podría tolerar", aclaran los abogados de Cervera.