Lo de Maggie Gyllenhaal es para echarse a reír, como ella mismo hizo (tras la perplejidad) cuando le dijeron que con 37 años era muy mayor para hacer de la amante de un actor de 55. O nos reímos o nos colgamos de una viga. El cine y la vida son así, señora, que diría Serrat. O podría haberlo dicho. En Con la muerte en los talones, la madre de Cary Grant (interpretada por Jessie Royce Landis) tiene sólo ocho años más que él. Pero no es sólo Hollywood y sus mandamases. Salta a la vista que el paso del tiempo resulta más jodido para las mujeres. Kenneth Branagh (54) es dos años más joven que Emma Thomson (56) y, sin embargo, hoy (no cuando estaban casados) ella parece muchísimo mayor. Branagh gasta esa buena pinta de señor de mediana edad. Hasta ha mejorado, gracias su pinta de zangolotino (como la de Errejón, que quizá también mejore de mayor). Kevin Costner, de 60, luce un aspecto magnífico. No como cuando era más joven, pero debe de ser uno de esos tipos para los que no sirve Maggie Gyllenhaal. Tampoco hay que olvidar que Maggie será todo lo guay, it y cool que quiera, pero, igual que Chloë Sevigny (a la que se pueden adjudicar los mismos palabros y vestidos espantosos), siempre ha parecido mayor.
Con lo de Maggie se recuerda mucho a Amy Schumer, que en un sketch de la tercera temporada de su programa decidió continuar lo que ya se exponía en Buscando a Debra Winger, el documental de Rosanna Arquette. Pero Amy Schumer lo hace con humor. No hay otra. Sin el drama del desprecio por las mujeres maduras en Hollywood, que es lo que se veía en ese aquelarre con Sharon Stone, Melanie Griffith, Vanessa Redgrave, Whoopi Goldberg, Charlotte Rampling, Diane Lane, Meg Ryan, Robin Wright Penn, Debra y Patricia Arquette, la única que repite en la versión humorística. Inside Amy Schumer es una extraordinaria serie de sketches creada y protagonizada por la actriz treintañera. Se estrenó en abril de 2013 en Comedy Central y la tercera temporada lo hizo en abril de 2015. Aunque la crítica la elogie ahora mucho, era buena desde el principio. Pero es verdad que la pieza en la que parodia What Makes You Beautiful de One Direction ha tenido mucha publicidad (los de la banda la invitan a quitarse el maquillaje pero cuando la ven con la cara lavada se echan para atrás). Y por supuesto, la otra que mencionaba, que se emitió en el primer capítulo de la última tanda. Amy va corriendo por el campo cuando se encuentra con Julia-Louis Dreyfus, Tina Fey y Patricia Arquette, que parecen tener una fiesta. Le explican que están celebrando el último día de follabilidad de Julia-Louis Dreyfus, un salto del tiburón que tienen las mujeres pero no los hombres. Ese día en que los medios deciden el fin de atractivo sexual de las mujeres (dejemos aparte a Monica Belluci como la más vieja de las chicas Bond a los 50, porque ella es una especie única). Schumer les pregunta quién dice cuando es el último ‘fuckable day’ de los hombres. Todas se ríen y le dicen que ellos siempre son ‘fuckables’. Patricia Arquette, antes de Maggie Gyllenhaal, ya contaba en esa ficción que no hizo un anuncio para AARP (una organización sin ánimo de lucro que atiende las necesidades de mayores de 50) porque "el director dijo que era muy vieja para hacer de mujer de Larry King", que tiene 81.
Pero siempre hay excepciones. María Dolores de Cospedal y José Antonio Monago tienen la misma edad (a punto de la de Belluci) y no lo parece. Ella es bastante ‘fuckable’. Él, nada. Aunque se los hayan follado a los dos.