La frase "Mariló Montero vuelve a ser protagonista en las redes sociales" se ha convertido en el pan nuestro de cada día, en algo tan cotidiano como respirar, comer y dormir. La última de la presentadora navarra tiene que ver con Grindr, una aplicación geosocial destinada al público gay, considerada la mayor red social para homosexuales.
Durante el programa de este jueves, Montero mostró un teléfono móvil -se desconoce si es el suyo- para explicar el funcionamiento de un servicio ideado para localizar a personas de la tercera edad. Evidentemente, lo que llamó la atención de los tuiteros fue el icono de Grindr.
El accidente -o como se diga- se produce en plena tormenta de rumores sobre la supuesta homosexualidad de la presentadora. Durante las vacaciones de Semana Santa, Montero fue fotografiada tomando el sol en topless, junto a una vieja amiga. Después de intentar a toda costa que las imágenes no fueran publicadas -finalmente, verán la luz- y evitar que la identidad de su acompañante se hiciera pública, manifestó su molestia ante quienes insinuaban que tiene una relación gay.