Si hace unos días las revistas se hacían eco de la extrema delgadez de Shaila Dúrcal en su último videoclip, la hija de Rocío Dúrcal ha vuelto a dar que hablar esta semana por sus cambios de peso.
La joven de 35 años aparece este miércoles en la revista Lecturas visiblemente mejor que cuando grabó el videoclip de su último disco en el que aparecía extremadamente delgada, con los ojos hundidos y con los huesos muy marcados.
Aunque la joven está mucho mejor, lo que realmente preocupa es la facilidad con la que Shaila pierde y gana peso.
El fantasma de la anorexia y la bulimia persiguen a la joven desde hace años. La propia Shaila confesó hace unos meses que tuvo anorexia cuando tenía 13 o 14 años. Aunque desde entonces, tanto ella como su familia han negado la existencia de un transtorno alimentario.