La crónica rosa de Es la mañana de Federico ha contado con Beatriz Cortázar, Emilia Landaluce y Rosa Belmonte, y como es habitual ha hecho un recorrido por todos los temas de la prensa del corazón. Entre ellas, la última aparición televisiva del pequeño Nicolás, que en su nueva intervención en Un tiempo nuevo volvió a confirmarse como un verdadero "fenómeno televisivo"... a pesar de que no dijo nada nuevo.
Tal y como aseguró la periodista Beatriz Cortázar en esRadio, y pese a esa "sonrisilla de pícaro", Nicolás "no dijo nada", o al menos nada verosímil acerca del CNI, y apenas confirmó que se considera "un conseguidor" y un "patriota". "Lo único que le ponía nervioso era cuando tenía que defender a Jaime García Legaz, negar que fuera homosexual o al hablar de la Pechotes". Esos serían, en opinión de la colaboradora de esRadio, los únicos temas tabú para el joven.
Una situación que empieza a contrastar con la de Pablo Iglesias, un fenómeno televisivo que, sin embargo, volvió a dejar plantados a los responsables del programa de Telecinco, que para subrayar el nuevo desplante (el segundo al programa), dejaron la silla que le hubiera correspondido en el debate... totalmente vacía.
Todo ello pese a que, tal y como recordó Cortázar, "hizo un curso de televisión con Helen Lindes" para quedar bien en cámara. Ambos tienen en común, al margen de sus diferencias, el hecho de ser "fenómenos televisivos". Pero mientras Nicolás repite encantado en el programa de Telecinco, Iglesias ha vuelto a dejar colgado al programa por segunda vez tras su fracaso en la entrevista con Ana Pastor en La Sexta. Aunque, tal y como se dijo en la mesa de la crónica rosa, la polémica con su novia Tania Sánchez también tenga algo que ver: "A alguien que se dedica a denunciar a los políticos -dijo Cortázar- y luego no predica del ejemplo, que no se le pueda preguntar de la novia...".