La cantante Pastora Soler, que este lunes anunció que deja su carrera musical "por miedo escénico", sufría mucho antes de los conciertos, y prepararlos suponía para ella "un auténtico suplicio", dijo hoy su representante y hermano, José Luis Sánchez.
En declaraciones a Efe, Sánchez ha dicho que desconoce el tiempo que la cantante estará retirada de los escenarios, "que pueden ser seis meses, un año o dos años, el tiempo necesario para volver a coger la confianza que ella necesita, porque preparar los conciertos era un suplicio, no dormía, no hablaba para que la voz no sufriese y así no podía seguir".
No obstante, ha destacado la profesionalidad de la artista, ya que "el público no notaba nada y lo daba todo en el escenario", pero ahora, ha tenido que parar su carrera "porque lo importante es ella, después ella y luego ella".
Tras terminar sin problemas la gira del año pasado, con conciertos como el del Gran Teatro de Huelva en octubre, el pasado 8 de marzo se desvanecía en un concierto en Sevilla, y volvió a tener problemas en el escenario el pasado domingo en Málaga.
Su representante ha señalado que solo se ha tenido que suspender el concierto previsto en Madrid el próximo 15 de diciembre, que cerraba la gira de 2014, ya que desde marzo se administró con cuidado el cierre de conciertos teniendo en cuenta los problemas de la artista, sumado a la faringitis aguda que sufrió cuando volvió dos meses después del desvanecimiento en Sevilla.
A través de su perfil en la red social Facebook, Pastora Soler -nombre artístico de Pilar Sánchez Luque- admitió que debió poner un "punto y aparte" en su carrera hace algunos meses, aunque "las ganas de luchar" la impulsaron a seguir, si bien ahora ha anunciado que deja su "actividad profesional hasta volver a recuperar la confianza" en ella misma.
Unas 7.000 personas han reaccionado a su anuncio en la red social, e incluso un grupo de seguidores ha creado el perfil de Twitter "Fuerza Pastora", que ya cuenta con 4.900 seguidores pocas horas después de haber sido activado.