La confusión de las imágenes del príncipe en Formigal

Este fin de semana, la noticia del príncipe Felipe pasando unos días en Formigal, donde acudió para practicar con amigos su deporte favorito, el esquí, ha sido fuente de diversas polémicas. La más inesperada de todas no tiene que ver con el hecho en cuestión, sino por las propias imágenes, en las que aparecía Felipe saliendo de cenar en la estación de esquí donde pasó el fin de semana sin Letizia. O mejor dicho, con su posible veto.

La televisión de esa comunidad, Aragón TV, obtuvo las ansiadas imágenes y avisó a las demás autonómicas de las mismas. Pero al poco tiempo, el domingo, se retractó y llamó a las cadenas pidiendo que las imágenes no se difundieran.

Este hecho dio pábulo a todo tipo de especulaciones. ¿Intentaba el jefe de prensa de Casa Real, Javier Ayuso, frenar el impacto de unas imágenes del príncipe sin Letizia cuando algunos periodistas hablan de crisis marital? ¿Se trataba de evitar crear una imagen ociosa del príncipe en un contexto de crisis general? ¿O quizá exponer al heredero de la corona en un momento en el que se intenta reforzar al Rey por encima de él? Hay incluso lugar para otra hipótesis más: ¿quizá contienen esas imágenes algo que hiciera quedar mal a don Felipe?

El hipotético veto a las imágenes de Formigal ha ocupado muchos titulares a lo largo de esta semana. Y ha dado lugar a un nuevo desmentido de Casa Real, que asegura que en ningún momento ha vetado unas imágenes que, además, servirían para hacer promoción turística de un enclave nacional. Aragón TV, por su parte, atribuye a un error humano la retirada y desmiente presiones del entorno de la institución, señalando que las imágenes están a disposición de los medios.

Si el pasado año el príncipe eligió la estación de Candanchú, en el oscense valle del Aragón, para practicar el esquí durante un fin de semana, este año se decidió por Aramón Formigal, centro invernal ubicado en el vecino valle de Tena en el que no esquiaba desde que tenía 6 años, y que ha sufrido una profunda transformación en los últimos años.

Tras la jornada de esquí, don Felipe y su amigo Pedro López de Quesada, marido de Cristina de Borbón-Dos Sicilias, cenaron en un restaurante de la urbanización de Formigal, en la que se alojaron desde su llegada el pasado viernes desde Jaca, donde el príncipe entregó la medalla de plata a los jugadores de la selección española de hockey sobre hielo.