
Los príncipes de Asturias acudieron el miércoles a la entrega del XXX Premio Francisco Cerecedo de Periodismo a Xavier Vidal-Folch, que este año ha sido concedido a este periodista catalán como reconocimiento a sus análisis e informaciones sobre la crisis económica y moral de Europa y España, así como por su visión sobre el encaje territorial de Cataluña en España que aborda en sus artículos.
Letizia Ortiz optó en esta ocasión por un mono negro con brillos plateados, un escote cruzado que en su caso resultaba sobrio, todo ceñido con un cinturón ancho. El conjunto se completó con sandalias de alto tacón y un bolso de mano con adornos de pedrería. No es la primera vez en los últimos días que Letizia optaba por el negro, que sabe vestir de manera moderna y elegante. El corte ancho de los pantalones, sin embargo, no le quedaba tan bien como los pitillo que suele elegir doña Letizia.
Pese a estar rodeada de periodistas, oficio de la princesa hasta que hace diez años se comprometió con el príncipe Felipe, Letizia cedió el primer lugar para que su marido pudiera ostentar el protagonismo en el acto.
El príncipe de Asturias hizo de nuevo un llamamiento a "continuar construyendo España" ya que, ha dicho, es "responsabilidad de todos", abogando por preservar "siempre y en todo momento" los "profundos vínculos familiares e históricos" por encima "de las tensiones, de las discrepancias y los desencuentros". El premio fue concedido al periodista catalán a Xavier Vidal-Folch como reconocimiento de sus análisis e informaciones sobre la crisis económica y moral de Europa y España, así como por su visión sobre el encaje territorial de Cataluña en España que aborda en sus artículos.
En su discurso tras la entrega del premio, el príncipe, que ha presidido el acto junto a doña Letizia, ha celebrado y reconocido el "buen periodismo", el que, ha recalcado, requiere libertad de información y libertad de expresión, que son garantías esenciales de todo Estado de Derecho.
En la edición de 2012, este galardón fue otorgado a Michael Ignatieff, en 2011 a Miguel Mora, en 2010 a Pepa Bueno y en 2009 a Enric González, mientras que el año anterior, que coincidía con el 25 aniversario del premio, fue concedido a la hispanista Bárbara Probst Solomon, quien se convirtió en el primer premiado de habla inglesa y en el sexto que escribía en una lengua distinta del español.