No sabemos cómo habrán sentado las fotografías de Pippa Middleton en Sevilla luciendo un sombrero con la bandera española en pleno conflicto con Gibraltar. ¡Hola! publica en su último número el testimonio gráfico de la noticia que adelantó Beatriz Cortázar: la cuñada del futuro rey de los británicos ha celebrado su 30 cumpleaños en un hotel sevillano con su novio, su madre y un grupo de amigos, con los que ha bailado flamenco, ha tomado gazpacho y ha lucido alpargatas de firma española. Después, la comitiva se marchó desde el aeropuerto de La Roca, con precios más económicos si vuelas al Reino Unido.
La ausencia de Kiko Rivera en la boda de su hermano pone de manifiesto que entre los Rivera Ordóñez y los Rivera Pantoja la relación no es buena. La excusa de que tenía un bolo en un pueblo de Toledo para no asistir al enlace es poco consistente, teniendo en cuenta que la boda era de mañana, y que podría haber pasado al menos por allí para saludar. Desde hace meses se ha rumoreado que los hermanos no se llevan tan bien como antes, debido, una vez más, a problemas con la herencia de su padre.
Y un día después de la boda de Fran Rivera, la duquesa de Alba ha aparecido en público flanqueada por su amiga Carmen Tello y su marido, Alfonso Diez. Cayetana ha acudido al funeral por la muerte de la duquesa de Medinaceli en la Catedral de Sevilla. Muy digna, no ha hecho ni un solo comentario del casamiento del que hasta hace apenas unos meses era su yerno preferido.