El ganador de la última edición de Gran Hermano, Pepe Flores, ha saltado de nuevo a la actualidad pero no a raíz de su actividad como bailaor, sino por unos incidentes producidos en el Hospital Clínico de Granada.
Los hechos ocurrieron durante la estancia en el centro de la madre del ex Gran Hermano. El pasado 10 de junio, el bailaor amenazó a una enfermera profiriendo, además, insultos y otras frases soeces.
"¡Como no lo hagas te mato! Cuando salgas de aquí te mato, te voy a destrozar la cara de un puñetazo", además de otros insultos de naturaleza sexual que figuran en el atestado policial al que ha tenido acceso El Mundo.
Ante la gravedad del asunto, el servicio del hospital llamó rápidamente a seguridad, lo que llevó a Flores a cerrar la puerta de la habitación, atrancarla y encerrarse con su madre en ella.
Cuando el bailaor se decidió a salir, y a la llegada de la Policía Nacional, Flores seguiá manteniendo una actitud despectiva, espetando a los guardas de seguridad que "él ganaba más en un año que ellos en toda su vida".
Flores aseguró a la Policía que los insultos eran una broma "malinterpretada" por la enfermera, que afirmó que ese día tuvo que salir "rodeada de compañeras" por si Flores cumplía sus amenazas. La enfermera –que seguirá adelante en lo judicial- aseguró que ella ni siquiera fue la encargada de atender a su madre, y que Flores simplemente la abordó por el pasillo.