Método 3 siguió a la baronesa Thyssen: amantes, robos, negocios en Sudáfrica…

La baronesa Thyssen aparece en medio de la polémica de Método 3. Según la revista Interviú, los detectives de la agencia hicieron un informe de Carmen Cervera en el que se buscaba perjudicarla en el reparto de la herencia del barón Thyssen. Los que encargaron ese informe fueron, supuestamente, los hijos del barón. Años después, y sin saberlo, la propia baronesa recurrió a la misma agencia en busca de datos sobre Blanca Cuesta, que entonces estaba a punto de casarse con su hijo.

Las jugosas conclusiones de Método 3 en torno Carmen, se produjeron a raíz de un informe encargado en 2001, un año antes de la muerte del barón –que dejó un patrimonio de nada menos que 3.000 millones de euros-. De la investigación se deducen muchos de los hábitos y gastos de la baronesa.

Según Interviú, la agencia siguió a la baronesa durante 5 días, las 24 horas. Así, descubrió que la clínica a la que acudía Tita para disimular sus arrugas era Oxigen, que acudió con su hijo Borja a comprar cuadros al pintor Antonio de Felipe –pagados en metálico- y que incluso mantenía una relación sentimental: "El último novio de Tita se llama Javier Báñez. Fue el profesor de kárate del hijo de Tita. Cuando ella empezó la relación, él estaba casado con una periodista llamada Mari Cruz Fernández. Ahora están separados por el affair con Tita".

Método 3 también revela que la baronesa dio cien millones de pesetas que pudieron servirle para adquirir una casa en Sant Feliu, junto a la urbanización donde vive Tita. La agencia apunta que podrían "dar dinero" a Báñez para conseguir más información sobre Tita.

Además de sugerir que Carmen habría podido mentir incluso sobre la zona de Barcelona donde nació, también apuntan que en uno de los colegios donde estudió, el Marymount, "ella tuvo relación con Pepita Mauri Cortina, una famosa madame de prostitutas española que ha fallecido".

También recogen un encontronazo don la justicia en el año 1963. "Fue a Lausanne (Suiza) como aupair de los hijos de Silvio Carlo René Triceri (un multimillonario argentino), no para estudiar como siempre dice ella. El 13 de febrero de 1963, el magazine Por qué publicó que Tita fue acusada de robar un anillo de los Triceri valorado en un millón de euros. Ella devolvió el anillo, aunque dijo que había sido un regalo de Triceri".

La agencia también concluye que Tita no paga impuestos en nuestro país, como tampoco en Reino Unido o Suiza, sino que utiliza sociedades de Vaduz, y aporta datos de las sociedades a las que pertenece, siguiendo las evoluciones ene l tiempo de todas sus sociedades. Incluyendo la participación en el grupo andorrano Orfund Holding creada por, entre otros, su hermano Guillermo –ya fallecido- y que en 1994 se dedicaba a comprar y vender oro y diamantes de Liberia y Sudáfrica para venderlos en España y Francia.

El dossier refleja un entramado de empresas que deriva en la distribución de joyas en Andorra, por lo que concluyen que "todo indica que este negocio es un fraude".

La baronesa les contrató a ellos

La baronesa, sin saber que fue espiada por Método 3, a su vez pretendió saber si la joven Cuesta estaba con su hijo por interés y si ganaba dinero con la relación. La investigación concluyó que ésta "no tenía patrimonio alguno ni ingresos hasta que conoce a Borja". La joven vivía entonces con sus padres y sus hermanos en Terrassa hasta que, según el dossier, compró con dinero de Borja una casa en Sant Feliu de Guíxols, además de pedir una hipoteca para una casa en Ibiza.

Los detectives informaron a la baronesa de que Blanca Cuesta vivía "con una tarjeta de crédito Visa Platinum del BBVA con un límite de 30.000 euros mensuales que le paga a través de una cuenta propia Borja Thyssen". Además, los dos jóvenes crearon una sociedad llamada Nandia Management para "facturar ingresos" de sus exclusivas para el mundo del corazón. El informe encargado por la baronesa también concluía que Blanca tenía problemas con Hacienda que suponían un "peligro para el patrimonio de Borja Thyssen".