El devenir de la pasada edición de Sálvame contó con un inesperado giro de los acontecimientos. Mientras Kiko Hernández y Mila Ximénez, colaboradores del programa, daban cuenta del "terrible" estado de la actriz Bárbara Rey, la propia exvedette llamó al programa y relató su situación en pleno llano.
Hernández puso en antecedentes a la audiencia, y aseguró que durante una visita a un bingo hace no demasiado tiempo, una amiga de la actriz se le acercó para hablarle de la mala situación que ésta atravesaba. "La seguimos y vemos que se está metiendo botellas de vino en el bolso", dijo Hernández. Lydia Lozano se sumó al escarnio y reveló que, también hace poco, Bárbara Rey visitó el casino de Torrelodones y perdió una pequeña suma de dinero, lo que provocó que "perdiera los papeles" allí mismo.
Fue el pistoletazo de inicio a lo que sucedió después. Después de la publicidad, Lozano aseguró que, tras hablar con una persona cercana a Bárbara Rey, la situación no era tan mala: "Tiene cinco casas y si estuviera mal de dinero, hubiera intentado vender alguna, que le han ofrecido 4.000 euros por alquilar el chalet de Marbella".
La llamada en directo
Y entonces entró la llamada de la propia Bárbara Rey. La actriz llamó al programa visiblemente alterada y entre lágrimas, acusando a los colaboradores. "Dar credibilidad a una persona que te encuentras en un bingo teniendo el teléfono para preguntarme, no lo entiendo, se me cae la cara de vergüenza de ver esta cantidad de barbaridades, no se puede decir sin contrastar". Rey negó la mayor sobre el episodio del casino y acusó a Lozano de "tomarse a risa" el asunto: "Parece mentira que digas semejante tontería", dijo en directo.
No obstante, se mostró así de sincera: "Claro que estoy en un mal momento, el peor de mi vida, pero no por lo que estáis diciendo vosotros, es el peor de mi vida ¿Os parece poco que tenga internada a mi hija en un sanatorio?", dijo en referencia al internamiento de Sofía Cristo en un centro hospitalario para desintoxicarse.
Y además admitió que su imagen ha empeorado mucho en los últimos meses, tema del que también dieron buena cuenta los colaboradores minutos antes: "Claro que estoy gorda, claro que estoy fea, sí que lo estoy, porque estoy hecha polvo, así que dejadme tranquila".