Si hace unos días la infanta Cristina de Borbón, involucrada por Diego Torres en el caso Nóos pero pendiente de ser imputada o no por el juez, decidía evitar a la prensa tumbándose en el asiento trasero de su coche, esta mañana se dejaba ver a la salida de su domicilio.
No era esa la primera vez que la infanta intenta "evitar" a los medios, informa Europa Press. También el pasado 15 de febrero cuando la pareja salía a cenar a Vía Veneto, Cristina agachaba la cabeza e Iñaki Urdangarín se escondía.
Esta mañana la infanta se dejaba ver cuando se subía a su vehículo y saludaba efusivamente a un coche que pasaba, en el que viajaban empleados. Quizás la nueva actitud de doña Cristina se deba a mostrarse igual de segura que lo ha estado siempre, ya que escondiéndose lo único que podría haber conseguido es crear un clima mucho más tenso del que ya hay establecido en su entorno.
Urdangarín, desmejorado
Por su parte, su marido Iñaki Urdangarin sigue haciendo uso de sus privilegios de la Casa Real en el club de tenis al que asiste regularmente. El duque de Palma está, sin embargo, mucho más desmejorado, ha perdido todavía más peso y la cara muestra signos evidentes de cansancio. Eso es lo que se pudo observar a la salida del club de tenis. Y es que el duque no renuncia a los privilegios que le otorgaba la Casa Real ni siquiera en los peores momentos de la instrucción del caso.
Urgangarin está viviendo los momentos más complicados de su vida después de no poder pagar la fianza que le impuso el juez Castro. El duque de Palma está a la espera de declarar el 23 de febrero por los correos con su exsocio Diego Torres que comprometen al príncipe Felipe y al rey don Juan Carlos.
Estos mails exponen un proyecto naútico muy ambicioso para el que no dudaron usar el nombre del príncipe de Asturias y de las infantas Cristina y Elena, y así conseguir jugosos patrocinios. Por el momento el duque de Palma se refugia en su familia para superar esta situación. Su mujer, sus hijos, su madre, Claire Liebaert Courtain, y su hermana Ana Urdangarin son su mejor apoyo.
Hace unos días veíamos a su hermana y a su madre paseando por las calles de Barcelona. Claire se trasladó a Barcelona temporalmente para estar al lado de su hijo y de su nuera hasta que esta situación mejore. Por su parte, Ana Urdangarín es famosa por su rechazo total a la presencia de las cámaras, pero aún así visita con regularidad la casa de su hermano y su cuñada para apoyarles en estos momentos.