La Casa Real debería plantearse seriamente contratar a Mario Pascual Vives como portavoz de la Institución. Atiende a los periodistas sin necesidad de que hayan pedido audiencia previa, mantiene la sonrisa y, lo más importante: lo dice todo sin decir nada. Este jueves, con la que está cayendo sobre su cliente, Iñaki Urdangarín, ha bromeado con su situación procesal comparándola con una de sus aficiones: el circo. Ha dicho que están en un momento que podría calificarse como de “más difícil todavía”, y que en el mundo circense también hay muchas fieras. Ha confirmado que el duque “no está en su mejor momento” y que la infanta Cristina “también está afectada”. Hay pruebas gráficas de que así es, aunque tampoco tendría lógica que en su aparición pública esta mañana se hubiera dedicado a sonreír. Sin embargo, Vives no ha dicho si va a recurrir la fianza impuesta a Urdangarín, si va a avalarla con su casa o quiénes son las fieras de las que habla.
Está resultando mucho más divertido el juicio que enfrenta a Paulina Rubio y Nicolás Vallejo-Nágera por la custodia de su hijo, que además se retransmite en directo. Las recriminaciones que venían haciéndose a través de la prensa se han materializado durante la última vista celebrada en Miami, en la que la cantante ha dicho que Colate es mal padre, que no cambia los pañales a su hijo o que no le atiende cuando tiene fiebre. Después se ha calentado y ha añadido que su expareja la agrede e insulta cada vez que quiere mantener con él una conversación. Una acusación demasiado seria que el español debería aclarar en un tribunal distinto al que lleva los asuntos de familia.
Alba Carrillo ha confirmado que sale, o algo así, con Feliciano López, al que ha definido como “un chico muy interesante”. La modelo ha presentado una colección de joyas en El Corte Inglés, y no ha puesto ningún reparo a la hora de hablar con la prensa de su vida privada, lo que ya dice algo de ella: es consciente de que está ahí por algo más que su cara bonita. Luego sí ha tirado de tópicos como que está ilusionada o que espera que sea para toda la vida. Como pareja de guapos tienen poca competencia.