La intepretación de Lindsay Lohan en el telefilm sobre la vida de Elizabeth Taylor está acabando de hundir la carrera de la actriz. Además de las malas críticas que ha recibido por su interpretación, eligió un look muy poco apropiado para el estreno.
Lindsay Lohan, estrella infantil cuya carrera se ha ido desluciendo por el alcohol, la droga, las juergas y los problemas familiares, lució un vestido brillante con aperturas delanteras de las que colgaban cuentas rojas. La actriz apareció con una estola de visón para cubrirse los hombros en un intento fallido por parecerse a Taylor. Las joyas tampoco fueron un acierto ya que optó sólo por unos pendientes, pero según los expertos su maquillaje sí fue una buena elección con labios en un tono oscuro y polvos de sol.
Liz & Dick narra el romance entre Elizabeth Taylor y Richard Burton en una época dorada en Hollywood. El filme pretendía ser la gran vuelta al cine para Lindsay Lohan, pero las críticas hasta el momento han sido muy negativas.
Ningún crítico norteamericano considera que la joven esté a la altura para representar a un personaje tan importante en la historia del cine. Sin embargo, Lindsay no opina lo mismo, tal y como declaró durante el estreno: "Me parezco a ella en muchos aspectos: estar en la escena pública, convivir con el estrés de lo que dice la gente, tanto si es verdad como si es falso".
Coincidiendo con la semana del estreno, la revista estadounidense US Weekly publica una entrevista con la actriz en que asegura: "No me arrepiento de nada. Me he hecho un tatuaje que dice 'Vive sin arrepentimiento'. No sigo que quisiera ir a la cárcel, pero he aprendido de ello".
Está claro que la joven actriz está mucho más centrada, sólo le falta elegir proyectos que estén a su alcance.