Algunos cargos del PP, entre ellos varios ministros, se las vieron y desearon para no quedar mal al tener que elegir entre dos bodas de dos dirigentes muy importantes e influyentes de su familia política. Por un lado, se casaba uno de los hijos de Alberto Ruiz-Gallardón en Santiago de Compostela y, por otro, la última de la estirpe de Isabel Tocino contraía matrimonio en Santander.
La cúpula de los populares tuvo a bien dividirse para asistir a ambos enlaces, si bien algunos optaron simplemente por no asistir. Acompañaron al hijo de Gallardón, Alberto, y a su prometida, María Teresa Touriñán, desde Mariano Rajoy y su esposa, Elvira Fernández, pasando por Alberto Núñez Feijóo, Ana Botella y destacados empresarios a nivel nacional.
En Santander también hubo mucho de abolengo. En el sí quiero de Isadora, hija de la exministra Tocino, y Gonzalo Gutierrez Botella estuvo la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal. No fue la única, también el alcalde de la ciudad, Íñigo de la Serna, o el ex ministro Ángel Acebes.
En los pasillos del Congreso, alguno de los invitados admitieron el aprieto ante la celebración de dos bodas con la marca del PP el mismo día. De forma irónica, un alto cargo llegó a hablar de "guerra" entre las familias por la lista de invitados.
Quien no fue ni a una ni a otra fue Ana Mato, la ministra de Sanidad, que acudió el sábado al entierro el diputado del PP Roberto Soravilla, fallecido hace pocos días. Todos en el Grupo Popular volvieron a mostrar su pesar por el adiós de "un hombre bueno".