España encabeza una lista europea, es líder en abandono de mascotas. Hasta 150.000 mascotas al año, 400 al día -especialmente perros- terminan tiradas en las cunetas de las carreteras, en contenedores de basura o lo más lejos posible de su hogar, ya que sus dueños saben que la fidelidad que caracteriza a estos animales les llevará a buscarles incansablemente, hasta la extenuación o la muerte.
Y las fechas las conocemos todos: Navidad, Semana Santa y verano. Cuando el perro sobra, cuando el juguete que parecía el cachorro, el capricho, se convierte en un ser vivo que necesita cuidados, atención y amor; y cuando el dueño, el humano, se convierte en animal.
Algunas de las mascotas abandonadas son rescatadas, pero conseguir que sean adoptadas es otra cosa. Las protectoras de animales se encuentran saturadas, desbordadas y, en ocasiones, sin recursos o muy limitados.
Ante esta situación, las asociaciones proponen la esterilización de los animales como medida para acabar con la cría indiscriminada. El Gobierno, por su parte, estudia prohibir la exhibición y venta de perros y gatos en tiendas de mascotas. Tampoco debería salir tan barato abandonar un ser vivo que está a nuestro cargo. Pero lo más importante es concienciar a las personas de lo que implica tener una mascota, enseñarles desde niños a ser responsables con un ser vivo que depende de ellos. Niños y adultos deben aprender que un animal es un ser vivo, que en el momento que entra en nuestra vida tiene que ser para quedarse, que su vida depende de nosotros.
Debemos aprender a mirarlos a los ojos y ver el amor que albergan, pero también el amor que necesitan.
"Es la compasión del hombre hacia los animales lo que le hace un verdadero hombre".
Albert Schweitzer (teólogo, filósofo y médico alemán)