Este año el matrimonio de Alaska y Mario ha hecho como el turrón El Almendro, ya que han vuelto a casa por Navidad después de haber estado más de un mes en Londres, terminando de grabar su último trabajo discográfico que verá la luz a finales de Enero. "Estamos muy contentos de cómo ha quedado la grabación, ha sido dentro de lo cabe poco complicada y hemos disfrutado mucho haciéndolo, aparte que a los dos nos vuelve locos vivir en esa ciudad".
La Nochebuena, me comentó Alaska, la pasaron como de costumbre, almorzando en casa de su madre con amigos, y después se fueron a casa de los padres de Mario para la cena, donde se quedan a dormir. El día de Navidad lo celebran también las dos familias juntas: "Lo pasamos en grande, además el árbol y el Belén nos encanta".
En el transcurso de la conversación, me comenta que el 31 se quedan a cenar en su casa, y después se reúnen con amigos, y como todo lo celebran mucho, el día de Reyes se vuelven a juntar. Cuando se entregan los regalos organizan una merienda para tomar el tradicional roscón. No se puede negar que son de lo más tradicional.
El año 2012 no ha podido ser más positivo para la pareja a nivel profesional, porque trabajo no les ha faltado a ninguno de los dos, y el éxito que han obtenido con el reality protagonizado por ellos mismos en la cadena MTV ha sido indiscutible, sin olvidar giras por toda España, sus actuaciones en México y Argentina, entre otros países, y como colofón, su boda el pasado Mayo en Madrid. Después de muchos años de convivencia, decidieron organizar un enlace como era de esperar súper divertido, primero en el Registro Civil, en la madrileña calle Pradillo, y después en una fiesta para amigos.
Alaska y Mario son dos de los personajes más queridos tanto por el publico como por la prensa, y siempre se muestran accesibles con todo el mundo. Mario tiene una gracia como poca gente, es natural, y siempre transmite, una energía súper positiva. No es de extrañar cuando Alaska habla de su Marito se le ilumine la cara, mientras que él siempre está pendiente de su Olvi. Da gusto verles, y sobre todo lo estupendos que están en su chris