Las ventas del comercio minorista en Canarias han descendido un 39,5 por ciento en abril con respecto al mismo mes de 2019 a consecuencia del impacto de la crisis sanitaria del coronavirus, que provocó que se suspendiera la apertura de muchos establecimientos al público debido al decreto del estado de alarma, según ha informado este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En el conjunto nacional, el comercio minorista registró un descenso histórico de sus ventas del 31,5 por ciento en abril respecto al mismo mes de 2019, como consecuencia del impacto de la crisis sanitaria y la suspensión de la apertura al público de muchos locales y establecimientos minoristas por la declaración del estado de alarma. Se calcula que en torno a un 46 por ciento de las empresas permanecieron cerradas al público.
Con este desplome, el mayor de toda la serie histórica, las ventas del comercio minorista encadenan dos meses consecutivos de retrocesos después de haberse hundido en marzo más de un 14 por ciento. Eliminados los efectos estacionales y de calendario, la facturación del comercio minorista cayó un 31,6 por ciento en abril, más del doble lo que retrocedió en marzo (-14,2 por ciento).
El empleo en el sector del comercio minorista retrocedió un 2 por ciento en el cuarto mes del año respecto al mismo mes de 2019, frente a la caída del 0,4 por ciento registrada en abril. El INE señala que el efecto del estado de alarma sobre el comercio minorista se ha visto diluido por la posibilidad de las empresas de acogerse a expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs), en los que el personal sigue formando parte de la empresa.
En tasa mensual (abril sobre marzo) y eliminado el efecto estacional y de calendario, las ventas del comercio minorista se desplomaron un 20,4 por ciento, más de lo que cayeron en marzo (-15,5 por ciento).