Hace más de dos años que los vecinos de la madrileña avenida del Manzanares llevan sufriendo el eslogan de el alcalde: "¿Qué pasaría si nunca pasase nada?". Lo que ha pasado, y pasa continuamente, nos lo han contado en esRadio los afectados por el descomunal proyecto.
Este martes, el propietario de un bar de las cercanías del río Manzanares increpaba a Gallardón que le había arruinado dos veces, y aún no lo había pagado los costes de la primera inundación. María López Dóriga, también vecina de la misma zona ha contado en esRadio las dimensiones del desastre: "Somos unos 99 vecinos los que hemos sufrido las inundaciones de aguas fecales, todo por las canalizaciones mal hechas que provocan que el agua entre con una presión brutal, que nos inunda los bajos, las casas, los huecos de los ascensores. Una salvajada".
Esta vecina madrileña considera que la única alternativa que les queda es "crear una plataforma de damnificados, para llevar a los responsables ante la justicia", porque hasta el momento no han recibido ningún tipo de indemnización, ni se la espera.
Esta espera interminable, ha hecho mella en los ánimos de los afectados, que como ha contado Enrique García, propietario del bar La Terraza: "El otro día, cuando vino un consejero a ver a un vecino, que lleva dos años sin cobrar, se le tiró al cuello. Pero yo creo que es normal, está pasando una y otra vez por lo mismo y nadie se responsabiliza".
Él mismo ha contado cual es la situación de su negocio, cada vez que caen dos gotas de lluvia: "todo lleno de metro y medio de agua, los frigroríficos flotando en aguas fecales, un congelador con 50 o 60 kilos de pescado que va pegando y rompiendo todo...la inundación ha sido cojonuda", cuenta.
Ambos denuncian que nadie se hace responsable del desaguisado. María López ha contado cómo por allí solo "se pasaron dos mandados del consorcio días después de las inundaciones, que no sabían nada, y encima dicen que ya no hay nada". Se trata de algo lógico porque como dice la propia afectada "el agua lo mismo que entra se va, y ellos vinieron cuando ya se había evacuado de algunos sitios".
Enrique García ha dicho que eso al menos es tener suerte, porque cuando fueron ni siquiera quisieron bajar a ver el desastre porque "vienen con zapatitos guapos y claro, no quieren mancharse". "Tendría que haber visto como estaba todo", porque "hablando mal, es mierda pura", remata.