L D (Agencias) Saberi, de 31 años, es iraní y tiene también la ciudadanía estadounidense, pero Teherán no contempla la doble nacionalidad. Washington considera los cargos presentados contra Saberi como "sin base ni fundamento" y ha exigido su liberación inmediata.
Según el Código Penal de Irán, una condena por espionaje puede conllevar la pena de muerte. El pasado mes de noviembre, las autoridades ejecutaron a un empresario que fue sentenciado por espirar en el Ejército para Israel.
Según el letrado, su defendida pretende apelar la decisión que ha adoptado un Tribunal Revolucionario de Teherán tras un breve juicio celebrado a puerta cerrada.
Saberi, de 31 años, fue arrestada el pasado 31 de enero por razones aún no aclaradas y ella misma comunicó su detención a sus padres 10 días después, pero les pidió que no dieran la voz de alarma porque confiaba en que sería puesta en libertad en breve. El 28 de febrero, su padre, Reza Saberi, decidió denunciar el caso a la prensa tras más de quince días sin noticias del paradero de su hija.
Reza Saberi, residente en localidad norteamericana de Fargo, aseguró que la reportera había sido detenida por comprar una botella de vino, cuyo consumo esta proscrito y penado bajo la rígida versión de la ley islámica que rige en Irán.
Desde entonces, los cargos contra Saberi han fluctuado desde la compra de alcohol a la definitiva condena por espionaje.
Dos días después de que Reza Saberi hiciera público el caso, el portavoz del ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Hasan Qashqavi afirmó que había sido arrestada por "trabajar de forma ilegal" al haber caducado su acreditación de prensa.
Veinticuatro horas más tarde, el portavoz del Poder Judicial, Ali Reza Yamshidi, confirmó que había sido trasladada a la prisión de Evine, en el oeste de Teherán, por orden de un tribunal revolucionario de la capital.
Finalmente, el 9 de abril de 2009, pocos días antes de que se iniciara el juicio a puerta cerrada, el fiscal segundo Hasan Zare Dehnavi acusó a Saberi, cuya segunda nacionalidad Irán no reconoce, de espiar para Estados Unidos.
Relaciones entre Irán y EEUU
La condena se produce en un momento de gran importancia en las relaciones entre Estados Unidos e Irán, que rompieron sus lazos diplomáticos en abril de 1980 tras consolidarse el triunfo de la revolución islámica que acabó con la monarquía del último Sha de Persia, Mohamad Reza Pahlevi, pro occidental.
Casi tres décadas después, el presidente norteamericano, Barack Obama, ha expresado su deseo de abrir una nueva relación con Irán si el régimen de los ayatolá abre el puño. Aunque la respuesta por parte del régimen ha sido cauta y en principio favorable, en algunos sectores más conservadores ha sembrado inquietud.
El portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Robert Wood, ha calificado de "infundada" la acusación de espionaje y la secretaria de Estado, Hillary Clinton, ha enviado una carta al Gobierno iraní solicitando la liberación de Saberi.
Clinton, decepcionada
La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, se mostró hoy "profundamente decepcionada" por la condena de ocho años. "Estoy profundamente decepcionada por las informaciones de la sentencia a Roxana Saberi por parte de la Justicia iraní", señaló la jefa de la diplomacia estadounidense en un comunicado difundido por el Departamento de Estado.
"Trabajamos de cerca con la potencia protectora de Suiza (que representa los intereses de EEUU en Irán) para obtener detalles de la decisión judicial y para garantizar su bienestar", afirmó Clinton en su breve comunicado. "Nuestros pensamientos están con sus padres y su familia en estos momentos difíciles", señaló.
"Seguiremos transmitiendo nuestras preocupaciones al Gobierno iraní", acerca del juicio y de la detención de Saberi, aseguró.
Saberi, con doble nacionalidad
Nacida hace 31 años en Nueva Jersey (EEUU), hija de padre iraní y madre japonesa, Saberi se crió en la ciudad de Fargo, en el estado de Dakota del Norte.
Tras licenciarse en 1997 en Comunicación y Francés por la Universidad Concordia, en Minnesota, cursó un máster en periodismo en la Universidad Northwestern (Illinois) y otro en Relaciones Internacionales en la Universidad de Cambridge (Reino Unido).
En febrero de 2003 viajó a Irán con pasaporte de este país, donde trabajó como periodista "freelance" para la emisora estadounidense National Public Radio (NPR), además de colaborar con la BBC británica y con las cadenas norteamericanas ABC, Fox News y el digital Feature Story News (FSN).
Actualmente cursaba un máster de cultura y literatura iraníes en una universidad de Teherán y se documentaba para escribir un libro sobre estos temas.
Las libertades de prensa han sufrido un enorme deterioro en Irán en los últimos diez años, durante los que se han clausurado numerosas publicaciones críticas con el Gobierno y han sido arrestados periodistas y blogeros.
En los últimos años, varios periodistas, investigadores y profesores con doble pasaporte estadounidense e iraní han sido retenidos y posteriormente liberados, entre ellos la periodista Parinaz Azima y la académica Haleh Esfandiari.