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Andalucía

El Ayuntamiento de La Línea quiere celebrar una consulta popular para convertirse en Ciudad Autónoma

El Ayuntamiento quiere un régimen orgánico-funcional, competencial y de gobierno político similar al de Ceuta y Melilla.

El Ayuntamiento quiere un régimen orgánico-funcional, competencial y de gobierno político similar al de Ceuta y Melilla.
El municipio gaditano cuenta con 63.278 habitantes y tiene una tasa de paro del 33%, según el censo de 2016. | Wikipedia

En las elecciones municipales de 2019, el nuevo partido La Línea 100 x 100 que lidera el funcionario municipal Juan Franco obtuvo 21 de los 25 concejales, una mayoría más que absoluta. Antes de los comicios prometió una batalla por conseguir el estatuto de Ciudad Autónoma, al estilo de Ceuta y Melilla, para La Línea.

Ahora, tras estudios e informes jurídicos, su equipo de gobierno llevará al primer pleno del próximo 1 julio el acuerdo para iniciar la consulta popular que decida sobre la conversión de La Línea en Ciudad Autónoma. La propuesta está incluida en el orden del día de la comisión informativa de Salud, Participación Ciudadana y Bienestar Social.

Hay dos informes que han decidido al Ayuntamiento a plantear directamente esta consulta a los ciudadanos. El primero tiene que ver con la situación geopolítica y económica de La Línea de la Concepción y su estrecha relación con Gibraltar y la nueva situación del Brexit. El segundo es una Memoria Justificativa redactada por el catedrático de Derecho Constitucional Antonio de Cabo de la Vega, ligado inicialmente a Podemos formando parte del equipo que apoyaba a Íñigo Errejón.

En la Memoria Justificativa, según la nota del propio Ayuntamiento, se argumenta sobre la conveniencia de celebrar la consulta y posteriormente, en caso de ser respondida afirmativa la pregunta propuesta, "dirigir a las Cortes Generales y el Gobierno de la Nación la aplicación del mecanismo constitucional, previsto en el artículo 144 a), para alcanzar la condición de Ciudad Autónoma".

El artículo citado dice textualmente:

"Las Cortes Generales, mediante ley orgánica, podrán, por motivos de interés nacional:

a) Autorizar la constitución de una comunidad autónoma cuando su ámbito territorial no supere el de una provincia y no reúna las condiciones del apartado 1 del artículo 143.

b) Autorizar o acordar, en su caso, un Estatuto de autonomía para territorios que no estén integrados en la organización provincial.

c) Sustituir la iniciativa de las Corporaciones locales a que se refiere el apartado 2 del artículo 143."

El primer paso sería preguntar a los linenses la pregunta siguiente:

"¿Cree usted conveniente que el Ayuntamiento de La Línea de la Concepción eleve al Gobierno de la Nación y a las Cortes Generales una petición para instar la conversión del municipio en comunidad autónoma, de acuerdo con el art. 144 a) de la Constitución Española?"

El catedrático vinculado a Podemos considera en su dictamen que es posible lo que tanto PP como PSOE consideraron una excentricidad. Esta excentricidad les condujo finalmente a la presencia testimonial en el gobierno de la ciudad fronteriza, asediada por un paro de casi el 35 por ciento (Gibraltar apenas tiene un paro del 1 por ciento), el imperio de los narcos y la dependencia de Gibraltar.

En tanto que Ciudad Autónoma, La Línea de la Concepción podría obtener un "régimen orgánico-funcional, competencial y de gobierno político similar al instaurado en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla" si bien, naturalmente, corresponde a las Cortes Generales "apreciar la concurrencia del interés nacional que fundara la conveniencia y oportunidad de dotar a La Línea de la Concepción, a través de una Ley Orgánica, la condición de Ciudad Autónoma".

Para conseguirlo, un Decreto de Alcaldía con número 1659/2019, de 8 de abril, permitió contratar los servicios de la Universidad Complutense de Madrid para la elaboración de un dictamen, por parte del Catedrático de Derecho Constitucional, Antonio de Cabo de la Vega, relativo a la viabilidad jurídica del proyecto. El dictamen, como se esperaba, fue favorable para el alcalde Juan Franco, promotor de la iniciativa autonomista.

Se trata de lograr que el municipio se sitúe en una posición intermedia entre el régimen orgánico-funcional y competencial que actualmente disfruta y el estatus de las actuales comunidades autónomas.

En la Memoria Justificativa fundada en el dictamen de Cabo de la Vega se aportan seis factores que fundamentan la singularidad de La Línea que justificaría obtener el estatuto de Ciudad Autónoma:

  • Es el único municipio español que comparte frontera con un enclave extranjero pendiente de descolonización, según Naciones Unidas.
  • Es un municipio que depende de la economía del Peñón.
  • Es un municipio que tiene contigüidad con un aeropuerto internacional.
  • Es un municipio que necesita recursos e infraestructuras para paliar su déficit notable en múltiples ámbitos socio-económicos.
  • Es un municipio cuyos intereses reales necesitan ser tratados en comisiones multilaterales o trilaterales con el Peñón.
  • Es un municipio que necesita adaptar su régimen fiscal y tributario a la realidad de la comarca, donde La Línea de la Concepción coexiste con un territorio, Gibraltar, en el que las condiciones fiscales son sumamente laxas.

En otro informe anterior coordinado por uno de los hombres fuertes del gobierno linense, el teniente de alcalde Mario Helio Fernández Ardanaz, se estudió la situación socioeconómica de la Línea, ligada desde siempre a las relaciones con Gibraltar. En su informe, se dice que "Gibraltar tiene un impacto sobre la economía de la comarca de 586.903.000 libras, aproximadamente 695.000.000 euros anuales".

La economía de La Línea está sujeta a su vecino Gibraltar debido a las relaciones comerciales, trabajadores transfronterizos, consumo y segunda vivienda de gibraltareños en España; la escasa industrialización de la localidad, teniendo su pilar fundamental en el sector servicios muy demandado por Gibraltar; hay falta de inversiones como consecuencias de las diferencias en los regímenes fiscales de ambas economías.

Ello conduce a un Ayuntamiento sin liquidez suficiente por la falta de inversión, industrias y la prestación de servicios a una población flotante que no repercute y a unos impuestos altos por falta de liquidez en el Consistorio municipal.

Igualmente, se justificaba la aspiración de ser Ciudad Autónoma en que su población se ve condicionada por la presencia vecina de Gibraltar - sube o baja según sean las relaciones con la colonia -, que aporta una población flotante de unas 10.000 personas que no contribuyen a las arcas municipales. 5.000 españoles trabajan en Gibraltar y 5.000 extranjeros residen en la Línea.

Por último, además de factores medioambientales, está el problema cada vez más grave y violento del contrabando de mercancías y drogas procedentes del Peñón dadas las exenciones fiscales que disfrutan las sociedades que se domicilian en Gibraltar.

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