El pasado 31 de mayo el juez Carlos Javier García Díez, del juzgado de primera instancia número 27 de Sevilla, estimó íntegramente la demanda presentada en nombre y representación de Vegeta Green S.L contra Bernat Soria Escoms, así como contra Biocorp Spain S.L. y contra D. José Antonio Mateos Fernández, y los condenó al pago conjunto y solidario de 400.000 €, más los intereses legales y las costas.
Aunque la sentencia no es firme porque cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Sevilla en veinte días desde su notificación, la condena reabre el caso de la corrupción socialista en la Junta de Andalucía en plena celebración de la campaña de las elecciones primarias para el liderazgo del partido en Andalucía.
Soria se relacionó con la Junta de Andalucía desde que comenzó la puesta en marcha lo que se conoce como Cabimer, Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa en 2002. En 2004 le fue concedida la medalla de Andalucía, junto a Cándido Méndez y otros.
El Boletín Oficial de la Junta de Andalucía informaba de que el 17 de octubre de 2002 la Consejería de Salud "anunciaba que un grupo de investigadores, coordinados por el científico alicantino Bernat Soria, desarrollarán en Sevilla trabajos con células madre". Dos meses después, el 12 de diciembre de 2002, la Junta de Andalucía y el científico Bernat Soria firmaron un convenio de colaboración para desarrollar en la comunidad la investigación con células madre.
Por aquel entonces, el presidente de la Junta de Andalucía era Manuel Chaves y desde septiembre hasta abril de 2002 la viceconsejera de Salud de la Junta de Andalucía era María Jesús Montero, actual Ministra de Hacienda del gobierno de Pedro Sánchez.
Después de 2004, con Chaves al fondo, Montero fue nombrada titular de la Consejería de Salud, responsabilidad que desempeñó hasta mayo de 2012, ya con José Antonio Griñán de presidente de la Junta. Luego asumió la cartera de Salud y Bienestar Social hasta septiembre de 2013 en el que fue nombrada por Susana Díaz, nueva presidenta de la Junta, como Consejera de Hacienda y Administraciones Públicas .
Es decir, el comportamiento de Bernat Soria tuvo que ser conocido y amparado por los presidentes de la Junta Manuel Chaves, José Antonio Griñán y Susana Díaz y los consejeros de Salud, Francisco Vallejo (2002), María Jesús Montero (2004-2013), María José Sánchez Rubio. María Jesús Montero, que consideraba la presencia de Soria en la Junta un "privilegio y un honor", dijo desconocer que tuviera alguna incompatibilidad con la actividad privada.
José Luis Rodríguez Zapatero le nombró ministro de Sanidad y Consumo el 6 de julio de 2007, cargo en el que fue reafirmado de nuevo en abril de 2008. Finalmente, la remodelación del gobierno Zapatero desarrollada en plena crisis económica, en 2009, desembocó en su cese. En 2008, Arcadi Espada, en El Mundo, demostró que Soria había falsificado su currículo profesional.
Apenas un mes después, fue recuperado de nuevo por la Junta de Andalucía donde permaneció hasta 2019 cuando fue despedido por el nuevo gobierno de Juan Manuel Moreno.
La Fundación Progreso y Salud, dependiente de la consejería de Salud y Familia, rescindió el contrato por mala fe contractual a Bernat Soria porque estaba demostrado fehacientemente que había incumplido la ley de incompatibilidades a la que se acogió a cambio de cobrar 5.000 euros anuales, cantidad que le obligaba a desempeñar su trabajo con exclusividad al servicio de la sanidad pública.
No se olvide que Bernat Soria había colocado a su mujer, Verónica Juan Quilis, en la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía. Su hija Bárbara Bernat Juan aparecía ligada a alguna de las dos empresas privadas detectadas por la Junta de Andalucía en cuyo consejo de administración aparecía Bernat Soria mientras trabajaba en la Junta. Su hija mayor, Aitana, aporta en su perfil de Linkedin que también estuvo ligada a empresas de su padre como NBT Newbiotechnic.
Desde 2006, siendo Manuel Chaves presidente de la Junta, el nombre de Bernat Soria aparece en el consejo de administración de empresas privadas. Por poner un ejemplo, en 2006, aparecía como administrador único de Grupo Biomédico de Investigación y en 2007, aparecía, además, como administrador de Carlet Patrimonial.
Resulta más que significativo que Soria reclamara a la Junta de Andalucía en su juicio por despido en diciembre de 2020 nada menos que 40 millones de euros por sus "derechos sobre diez patentes" que se registraron durante su etapa de responsable público referentes al diagnóstico de enfermedades como la fibrosis hepática y la enfermedad celíaca o un procedimiento para la obtención de células productoras de insulina. No hay sentencia por ahora que se sepa.
Bernat Soria, a pesar de que el techo de los sueldos públicos estaban limitado a 68.000 euros, cobró el sueldo más elevado de toda la Junta de Andalucía, más del doble de los presidentes de la Junta. Habitualmente, cobraba sobre 150.000 euros al año y llegó a percibir, según El Confidencial, hasta 170.438 euros en un solo año, casi 15.000 euros al mes.
Se creía que Soria había tenido participación en unas pocas empresas cuya administración o participación simultaneaba con su puesto de director del Departamento de Células Troncales del Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa (Cabimer). Pero Libertad Digital ha podido saber que el número de empresas en las que ha tenido presencia el ex ministro es muy superior, bien por sí mismo, o por mediación de su esposa, una de sus hijas e incluso de su yerno. Más de una decena.
(Continuará).