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Cs incumple el pacto en Granada y no cede al PP la alcaldía los dos próximos años

La visita de Arrimadas a Andalucía ha dado pie a tratar el incumplimiento del pacto en Granada y otras cuestiones de la actualidad andaluza.

El alcalde de Granada, Luis Salvador. | Europa Press

La visita de ayer de Inés Arrimadas a Andalucía ha traído dos consecuencias: una, que se ha fijado la fecha de las elecciones andaluzas para el 27 de noviembre de 2022, y dos, que Ciudadanos se niega a cumplir el pacto de Granada por el que Luis Salvador, actual alcalde de la ciudad por dicha formación, debería dar paso a dos años de gobierno del PP, según lo acordado entre el expresidente del partido, Sebastián Pérez, y la dirección de Ciudadanos, y confirmado por el ex secretario de organización de la formación, Fran Hervías, ahora en el PP.

Como asunto colateral pero importante, dados los vientos que soplan en Cataluña y País Vasco, es la concesión de la medalla de honor de Andalucía al rey Felipe VI. En un ambiente de preindultos y de presión, que la comunidad autónoma más habitada de España conceda su medalla al monarca que pronunció un discurso memorable tras el golpe de Estado de 2017, tiene su significación.

Naturalmente, poner fecha a las elecciones andaluzas no tiene otro objeto, y así lo subraya El Mundo, de enmudecer los runrunes sobre anticipos electorales que recorren sistemáticamente la geografía política andaluza dada una composición actual del Parlamento que permite una moción de censura de toda la izquierda unida si se le suman sólo 5 de los 21 escaños que tiene Ciudadanos.

Que tal moción, o cuestión de confianza, en su caso, como quiere Juan Espadas, candidato alternativo a Susana Díaz en las primarias socialistas que duraran hasta el próximo 13 de junio, es posible se funda en que las encuestas pronostican un batacazo total de Ciudadanos que pasaría de tener 21 diputados a tener sólo 2, lo que hace emerger sospechas acerca de la disposición del ala "progresista" a un acuerdo con el PSOE.

Puede fijarse la fecha, pero no puede asegurarse que vaya a ser respetada. Primero, porque es prerrogativa exclusiva de Juan Manuel Moreno, que está de acuerdo con la prefijada. Segundo, porque visto lo visto en Murcia y Madrid, no puede descartarse que los 21 escaños de Ciudadanos vayan a respetarla.

En otro orden de cosas, la fijación de una fecha concreta tiene efectos sobre las demás formaciones políticas. De una parte, la Junta trata de abrir una brecha política en la campaña de primarias en el PSOE que se celebran en este momento porque Pedro Sánchez y Juan Espadas insistieron en que podrían ser convocadas anticipadamente mientras que Susana Díaz insistía en que no había peligro alguno de que tal decisión se tomase.

Quiere decirse, pues, que las que han sido anticipadas realmente han sido las primarias socialistas que Susana Díaz había situado a finales de este año. La precipitación y el interés de Sánchez y su candidato por hacerlas cuanto antes serán motivo de controversia en el actual proceso de primarias.

Igualmente, en el caso de Vox, PP y Ciudadanos mandan un mensaje a Manuel Gavira, portavoz parlamentario, y a Santiago Abascal para que abandonen toda esperanza de anticipación electoral. Eso sí, corren el riesgo de un desgaste notable si, por cualquier circunstancia no prevista, es preciso tomar la decisión de convocarlas antes de esta fecha fijada.

Cloacas e incumplimientos en Granada

El segundo gran tema de la visita de Arrimadas ha sido el gobierno de la ciudad de Granada. En las elecciones municipales de 2019 aunque ganó el PSOE con 10 concejales (13 sumando los 3 de Podemos), la alianza de PP y Ciudadanos que sumaron 11 (7 y 4 respectivamente) hizo posible un gobierno de centro-derecha apoyado por Vox siendo nombrado alcalde Luis Salvador, exsenador del PSOE, a pesar de ser fuerza minoritaria en la coalición.

El candidato del PP, que debería haber sido el alcalde natural, fue postergado en favor de Salvador. Sebastián Pérez había optado en las primarias nacionales del PP por la figura de Pablo Casado frente a Soraya Sáenz de Santamaría, y tal decisión no gustó a la actual dirección del PP de Juan Manuel Moreno y Elías Bendodo.

Cuando se negociaba la alcaldía de Granada, la dirección andaluza del PP decidió entregar la alcaldía de Granada a Ciudadanos para fortalecer su pacto con dicho partido en la Junta al tiempo que descabalgaban al histórico Sebastián Pérez de la posibilidad de ser primer edil de su ciudad.

Sin embargo, el pacto suscrito entre Sebastián Pérez y Luis Salvador ha sido reconocido y testificado por el propio portavoz de Ciudadanos y concejal de Empleo de Granada, Manuel Olivares, que confirmó su existencia, como ya había hecho Fran Hervías, exsecretario de Organización de Ciudadanos en tiempos de Albert Rivera y ahora cargo destacado en el PP de Casado.

Por si fuera poco, aparecieron unas grabaciones proporcionadas por el Ideal de Granada en las que el trapicheo de cargos, sueldos, puestos y cuantías entre PP y Ciudadanos fue sobresaliente incluyendo ofertas para silenciar a Vox, que denunció la operación de compra.

Por sentirse traicionado por las cúpula andaluza y nacional del PP entre los que menciona el dúo Teodoro García Egea-Elías Bendodo, Pérez, presidente provincial del PP, presentó su dimisión. Posteriormente, presentó asimismo la renuncia a sus competencias en el equipo de gobierno de Granada, reservándose el acta de concejal, un acta clave que puede decidir la alcaldía de la ciudad.

Pérez, que se considera otra "Cayetana" del PP junto a Isabel Bonig, como explicó a Libertad Digital ayer, ha afirmado que los que están diciendo que quiere el triunfo del PSOE en Granada están mintiendo. "Lo que yo quiero es que se respete el pacto suscrito. Quiero que el PP obtenga la alcaldía de Granada y que el candidato del PP sea otro".

Ni siquiera aspira a serlo él mismo, porque ya está fuera del PP, pero considera que todos los candidatos que han sido barajados por el PP de Casado y Moreno han sido traidores a su persona. No descarta su apoyo si un candidato del PP tiene su confianza. Por ello, advierte que no quiere que el PSOE recupere la alcaldía pero que, si Luis Salvador no cede la alcaldía, "van a pasar cosas".

En definitiva, el disputado voto de Sebastián Pérez es decisivo para alcanzar la cifra de los 14 concejales necesarios para formar un gobierno de mayoría absoluta si el PSOE presenta una moción de censura, como es fácilmente imaginable.

Actualmente, como hemos esbozado, hay 10 concejales socialistas, 6 del PP, 4 de Ciudadanos, 3 de Vox y 3 de Adelante Andalucía (entonces marca de Podemos). Es decir, que sin el voto de Sebastián Pérez puede producirse un empate a 13, o cualquier cosa si falla alguno de los votos por las razones que sea.

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