L D (Agencias) Agentes de la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a un total de trece personas en la segunda fase de la 'operación Nova'. Dos de los detenidos lo han sido en Madrid, otros dos en Cádiz, cuatro en Valencia y otros cinco en diferentes centros penitenciarios, según informa la agencia Europa Press.
Se han producido diversos registros y a todos los detenidos se les ha requisado abundante documentación, correspondencia y cassettes y cintas de vídeo en árabe. Los detenidos pasarán a disposición judicial y el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha decretado la incomunicación de todos ellos.
Los detenidos en Madrid son marroquíes; los de Cádiz y Valencia, argelinos. Por otro lado, en el polémico centro penitenciario de A Lama (Pontevedra) se ha detenido a dos argelinos y un marroquí; en el de Nanclares de Oca un marroquí; y en el de Puerto de Santa María (Cádiz), otro argelino. El argelino Shoubi Khouni, aislado en la prisión de A Lama (Pontevedra) fue condenado en 2001 por la Audiencia Nacional junto al considerado "emir" del 11-M, Allekema Lamari.
Según informaron a EFE fuentes de la investigación, Khouni fue detenido en Valencia en 1997 junto a otros diez presuntos miembros del Grupo Islámico Armado (GIA), entre ellos Lamari, que el pasado 3 de abril se suicidó en Leganés (Madrid) junto a otros seis de los autores de los atentados del 11 de marzo.
Según informaron a EFE fuentes de la investigación, Khouni fue detenido en Valencia en 1997 junto a otros diez presuntos miembros del Grupo Islámico Armado (GIA), entre ellos Lamari, que el pasado 3 de abril se suicidó en Leganés (Madrid) junto a otros seis de los autores de los atentados del 11 de marzo.
Tres en la cárcel de A Lama
En la prisión pontevedresa, agentes de la Policía Judicial de Madrid procedieron al interrogatorio de los tres internos y a la inspección de sus respectivas celdas, según las mismas fuentes, que no pudieron precisar si ha sido requisada alguna documentación, correspondencia u otros objetos que tuviesen en su poder.
Las mismas fuentes penitenciarias explicaron que uno de los internos, el argelino Aspri Smali, es considerado un líder espiritual islámico, y es miembro del Grupo Islámico Armado (GIA) y que en el expediente del centro penitenciario constaba su pertenencia a banda armada. Este individuo, según las mismas fuentes, se encontraba habitualmente aislado en una celda y era sometido diariamente "a un control minucioso". Además, presuntamente esta persona había enviado un giro de dinero a uno de los terroristas que se suicidaron en el piso del barrio madrileño de Leganés.
Los otros dos internos interrogados, Amin Mohamed y Soubi Kunic, son de nacionalidad marroquí y están acusados de delitos comunes por robo o contra la salud pública, indicaron las mismas fuentes. Ambos son considerados en el penal como los "secuaces" del líder espiritual islámico y se encargaban de extorsionar al resto de los reclusos árabes, agregaron las mencionadas fuentes, que apuntaron que en esta prisión hay 300 internos islámicos, de los cuales 250 son marroquíes y 50 argelinos.