Ange Postecoglou se ha propuesto cambiar la imagen de Australia contando con jugadores que bajen la media de edad de la selección. Es un cambio arriesgado cuando solo la tercera parte de los convocados estuvieron en Sudáfrica. Ben Halloran, Bailey Wright, Massimo Luongo, Adam Taggart y Josh Brillante podrían pasar el corte y entrar en la lista definitiva del 2 de junio. Tim Cahill, máximo goleador histórico de Australia, será el capitán. Destaca la llamada a Marck Bresciano. El mediocampista fue suspendido del fútbol internacional durante cuatro meses por las irregularidades encontradas en su traspaso al Al Gharafa.

Postecoglou cree que la juventud, muchos menores de 25 años, puede ser un aspecto positivo por su frescura, falta de presión y capacidad de crecimiento. Es su forma de sentar las bases para el próximo Mundial de Rusia pero sin dejar de lado la inminente cita. Una de las ausencias más destacadas es la de Lucas Neill. Tiene 36 años, juega en el Doncaster Rover de la Tercera División inglesa y, aunque ha trabajado a conciencia para entrar en la lista, sólo ha disputado cuatro partidos esta temporada. El seleccionador australiano no cree que sea capaz de afrontar con garantías un Mundial y necesita jugadores que aguanten físicamente.

Australia está llamada a ser la selección que cierre el grupo B. España, Holanda y Chile tienen experiencia, calidad y mejores plantillas. Lo desconocido puede llegar a sorprender y pueden verse favorecidos si provocan el tropiezo a las favoritas.