Asimilación o ¡puerta!
Viernes 14 de julio a las 14:30 horas
Sobredosis empírica, para acabar cerrar la primera sesión del curso sobre Demografía e Inmigración.

Tres expertos en análisis de los fenómenos sociales: Rafael Puyol, ex rector de la Universidad Complutense y catedrático de Estadística; Mikel Azurmendi, profesor de Antropología de la Universidad del País Vasco, y Amando de Miguel, catedrático de Sociología y viejo conocido de los lectores de LIBERTAD DIGITAL, donde es uno de sus columnistas más apreciados.

Por cierto, los escritores e intelectuales de este periódico han hecho pleno en esta edición del Campus. Prácticamente en todos los cursos, ha habido al menos una voz familiar para el público de LD.

Datos útiles como soporte para el análisis, los suministrados por los profesores De Miguel y Puyol.

Sus contribuciones vienen a confirmar el diagnóstico intuido por Steyn: España se vacía de españoles y se llena de inmigrantes, un vuelco demográfico común a todos los países desarrollados de Occidente.

El profesor Azurmendi ha optado, en cambio, por exponer un programa de mínimos para evaluar el impacto de la inmigración en nuestras sociedades. Su exposición, orientada al “qué hacer” más que al “qué hay”, pone las cosas más fáciles a un periodista.

Azurmendi ha ido por el mismo derrotero que Steyn: saber analizar, atreverse a denunciar, conocer para exigir.

El profesor vasco formula la que considera “pregunta clave” para evaluar el impacto de la inmigración: “¿Están dispuestos los inmigrantes a integrarse?”.

Azurmendi no tiene ningún reparo en hablar de “asimilación”. La defiende, de hecho, como criterio para acoger a los inmigrantes. Entiende por “asimilación” la plena integración en el “demos” occidental, el conjunto de valores democráticos y liberales que conforman nuestra civilización.

Repara en la “paradoja de la inmigración”.

“Creemos que van a solucionar nuestro grave problema demográfico, pero no es así. Si tienen tantos hijos como en sus países, entonces no se asimilarán, y si se asimilan, entonces no resolverán nuestro problema demográfico”, comenta.

Para Azurmendi, es peligroso tratar a la inmigración exclusivamente como mano de obra para los trabajos que los españoles, o los europeos en el resto del continente, no quieren hacer.

“La solución a la demografía no la van a dar los inmigrantes”, anuncia. “Los inmigrantes sólo dan la solución a los trabajos que no queremos hacer, pero no a nuestra grave crisis de natalidad”.

“No tiene que darnos miedo el cambio europeo de pigmentación de la piel, en dos o tres generaciones. Lo que hay que temer es el cambio en el demos, en la ciudad política. Para mí, la pregunta esencial es si los inmigrantes son españoles”, afirma Azurmendi.

“El problema es si se integran o no”, subraya. “No son sólo las costumbres, sino un conjunto de valores esenciales, el demos, lo que nos hace ciudadanos. Nosotros sabemos que un español puede vivir hoy en cualquier país de Europa, porque comparte los mismos valores, el demos”.

“A un inmigrante hay que pedirle eso”, continúa el antropólogo vasco. "Los inmigrantes que no son de nuestros valores, de nuestras creencias, de nuestras propensiones a actuar, los que no son casi como nosotros tienen que serlo, para ser ciudadanos. Porque si no, serán simple mano de obra”.

“Estoy por la absoluta asimilación”, defiende. “El que no es de nuestra cultura democrática, tiene que serlo, y si no, puerta. Coman lo que coman, follen lo que follen, cada cual con sus coranes, sus talmudes, sus biblias, pero tienen que vivir con nuestros valores, ser ciudadanos, para vivir aquí”.

Tanto Azurmendi como Amando de Miguel se muestran partidarios de cambiar los enunciados de las preguntas de las encuestas demoscópicas sobre xenofobia. “Hemos aprendido a mentir”, advierte De Miguel, “y si nos preguntan si nos consideramos xenófobos, evidentemente que vamos a decir que no. La pregunta correcta sería: ¿Cree que hay demasiados extranjeros?”.

Azurmendi tiene clara la respuesta:

“Para mí, claro que hay demasiados extranjeros; me refiero a demasiados extranjeros de los que no sabemos si quieren integrarse o no. Hay demasiados extranjeros desde el punto de vista del demos”.

No dirán que no hay ideas para reflexionar y, sobre todo, para actuar. De eso se trata, en este privilegiado mirador de la realidad.

Esta tarde, a partir de las 17:00 horas (16:00 horas, en Canarias), más: Mesa Redonda con Eugenio Nasarre, Víctor Pérez Díaz, Héctor Cebolla e Inger Enkvist. El tema promete: Familia/Educación.

Se lo contaremos, faltaría más.

Coloquio con Steyn a puerta cerrada
Viernes 14 de julio a las 11:55 horas
La conferencia de Mark Steyn ha dado pie a un vibrante coloquio con los alumnos del seminario sobre Demografía e Inmigración. No nos está permitido contar lo que se habla en estos debates.

En fin, las normas. ¿Tienen sentido? Seguramente, para los organizadores. Quieren que los políticos que asisten a estas sesiones académicas se sientan cómodos y puedan hablar en libertad.

Para los periodistas, el apagón es una auténtica faena. Somos testigos de aportaciones a menudo más interesantes que las que se producen en las ponencias y, sin embargo, no podemos transmitirlas a nuestros lectores.

Mientras llega la hora del siguiente coloquio con Amando de Miguel, Rafael Puyol y Mikel Azurmendi, la comunidad académica disfruta del café de media mañana.

El poso de la brillante ponencia de Steyn está en todas las conversaciones.

"Occidente está externalizando su futuro"
Viernes 14 de julio a las 11:45 horas
El director del curso, Miguel Ángel Cortés, define el estilo de Steyn como “energizante”. Responde, en efecto, al perfil de un agitador brillante, a menudo vitriólico, que zarandea las mentes y azota sin piedad el pensamiento políticamente correcto.

“Ustedes se van a extinguir mucho antes que los osos polares”, advierte a los españoles preocupados por el cambio climático y las profecías apocalípticas de Gore.

El colapso de Occidente es algo más que una hipótesis intelectual, se está gestando ya en un vuelco demográfico del que casi nadie se atreve a hablar porque no es “progresista”.

“En Yemen, Somalia, Afganistán, Pakistán, la media es de 6 o 7 bebés por pareja. Todos esos países tienen en común el Islam, y también el hecho de que gran parte de sus poblaciones están emigrando a Europa y América del Norte”, constata Steyn.

“Para producir los niños que no queremos tener nosotros, Occidente utiliza como pabellón de natalidad los países en desarrollo. En los cinco últimos años, la población canadiense ha crecido en 1,6 millones de personas. De ellas, 1,2 millones son inmigrantes”, ha expuesto.

“Los canadienses nativos ya eran una minoría del 25 y cada vez serán una minoría más acusada”.

“Cuando el 25 o más de tu crecimiento demográfico viene de los inmigrantes, estás externalizando tu futuro. Si son rusos, por ejemplo, como en Canadá, será bueno para el jockey sobre hielo y para el crimen organizado, pero no para otras cosas”, ironiza Steyn.

Sobre el caso de España, anota que es “una excepción” porque “sigue teniendo un canal natural de inmigración con América Latina”, pero “en el resto del mundo, la fuente natural del crecimiento es el Islam, que ya representa el 80 por ciento de la inmigración”.

Steyn extrae algunas implicaciones de la revolución demográfica sobre el otro gran desafío de la civilización, el terrorismo.

“En Europa, conocéis el terrorismo, pero hay una diferencia entre el terrorismo tradicional y el islámico, y esa diferencia es el telón de fondo demográfico. Si la población vasca hubiese estado creciendo tres veces más que la población española, por ejemplo, sería imposible ganar esa batalla. Ésta es la verdadera amenaza a la que nos enfrentamos con el terrorismo islámico. No es que todos los británicos islámicos, por ejemplo, quieran poner bombas, sino que hay una población enorme que comparte los mismos objetivos que el terrorismo islámico”.

Una visión clara y aleccionadora.

A las 12:00 horas, da comienzo una mesa redonda con Rafael Puyol, catedrático de Demografía, Amando de Miguel, catedrático de Sociología y columnista de LIBERTAD DIGITAL, y Mikel Azurmendi, antropólogo y profesor de la Universidad del País Vasco.

“Hace falta un niño para crear un pueblo”
Viernes 14 de julio a las 11:10
Mark Steyn alerta sobre el “declive demográfico” de las sociedades occidentales, un fenómeno que acelerará la crisis de nuestra civilización. El pensador canadiense convierte un viejo proverbio predilecto de la izquierda, sobre todo de la norteamericana, en el centro de su refutación.

“Dice Hillary Clinton que hace falta un pueblo para criar a un niño, siguiendo un supuesto adagio africano que, por supuesto, nadie ha oído jamás en África. En realidad, es justo al revés: hace falta un niño para tener un pueblo”, señala Steyn.

La frase resume el sentido de toda su conferencia. El columnista de LIBERTAD DIGITAL cree que el principal problema al que se enfrentan Europa y América del Norte es la despoblación de nativos y su sustitución por lo que llama “una externalización demográfica”.

“Hemos decidido subcontratar externalizar la fabricación de personas” mediante la inmigración masiva, un fenómeno nuevo que define, a juicio de Steyn, el gran desafío que tiene ante sí Occidente.

Mark Steyn abre el cuarto seminario
10:30 horas
Comienza el cuarto y último seminario del Campus FAES 2007. Demografía e inmigración: consideraciones y consecuencias. Mark Steyn, escritor y ensayista canadiense y columnista habitual de LIBERTAD DIGITAL inicia la ronda de ponentes. "Un agitador brillante", lo define Miguel Ángel Cortés, director del curso. Vale la pena aproximarse a este interesante pensador a través de su interesante web personal, http://www.marksteyn.com/.

Último blog del campus FAES
13 de Julio, 8:23
Cierra el programa del Campus 2007 un curso sobre Demografía e Inmigración: consideraciones y consecuencias, dirigido por Miguel Ángel Cortés , portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular del Congreso. Mark Steyn, periodista y escritor canadiense, colaborador habitual de LIBERTAD DIGITAL, será el encargado de levantar el telón de este seminario, que contará, además, con los puntos de vista de Víctor Pérez Díaz, catedrático de Sociología; Héctor Cebolla, investigador del Instituto Juan March; Inger Enkvist, hispanista sueco, Amando de Miguel, catedrático de Sociología y columnista de LIBERTAD DIGITAL; Mauricio Rojas, diputado del Partido Liberal sueco, o Román Escolano , economista, entre otros.

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