La medida afectará a las calles de un único carril de circulación, a las vías secundarias incluidas en el llamado Segundo Cinturón y, en algunos casos, al carril derecho (en cada sentido) de calles secundarias con varios carriles de circulación en las que, por ahora, no se prevea la implantación del carril bici.
Entre los principales objetivos de esta medida figuran posibilitar a los ciclistas, con mayor seguridad, el uso de la calzada sin que ello signifique la introducción de obstáculos o restricciones más importantes para los vehículos a motor, informan fuentes municipales en una nota de prensa.
La opción de crear vías "pacificadas" se pondrá en práctica a través de señalización horizontal y vertical que marcará las zonas y calles en las que la velocidad se limita a 30 kilómetros por hora. También se instalarán grandes paneles informativos en los accesos a la ciudad en los que se indicará que, en todas las calles de un único carril, la velocidad estará limitada.
El procedimiento de adjudicación de los trabajos necesarios (señalización, ampliación de aceras y orejetas que permitan la instalación de los postes) ya ha sido convocado a través de la página web del Ayuntamiento de Zaragoza.
El presupuesto base de licitación es de 300.000 euros y tiene un plazo de ejecución de seis meses, con la previsible creación de 15 puestos de trabajo.
La pacificación del tráfico consiste en una serie de medidas dirigidas a ajustar la velocidad e intensidad del tráfico rodado sobre vías convencionales a niveles compatibles con una utilización peatonal y ciclista "segura" y confortable del espacio público urbano.
El objetivo de la pacificación no es sólo mejorar la convivencia del vehículo con peatones y ciclistas, sino que estas vías entren a formar parte de los itinerarios ciclistas, completando la red de la ciudad al enlazar con carriles bici o itinerarios accesibles para las dos ruedas.